Los niños con esa ascendencia cultural fueron los autores de las obras pictóricas
Mérida, Yucatán, 22 de enero de 2018.- Las obras plásticas que componen la muestra colectiva «Unéen Eek’o’on» (reflejo de estrellas) se presentan son producto del taller de Reconocimiento de Entorno y Dibujo que se llevó a cabo durante los meses de marzo a agosto de 2017 en las localidades de Opichén y Kinil, Tekax. Participaron niños y niñas con ascendencia maya, quienes son estudiantes de cuarto y quinto grado de primaria.
Los dibujos se realizaron con la técnica pastel sobre cartulina, los estilos demuestran la experimentación en el uso de tizas y colores pastel, una forma distinta de crear dibujos tomando como punto de partida sus conocimientos previos en dibujo. En cada dibujo se representan los conocimientos y prácticas culturales acerca de la milpa y el solar.
A través del espacio recreativo del taller y la exposición, se intenta difundir el patrimonio biocultural, la relación y conocimientos que el ser humano tiene de la naturaleza que a través de años han sido parte del desarrollo gradual; entendimiento de los tiempos para cultivar en las milpas y traspatios, indicadores o comportamiento de la naturaleza para alertar el advenimiento de momentos críticos del clima, como los huracanes, tiempos de descanso del aprovechamiento de flora y fauna, y rituales, por mencionar algunos ejemplos.
El proyecto es realizado por Sergio Novelo Barco, gestor cultural independiente quien cuenta con apoyo de Fondo Nacional para la Cultura y las Artes (FONCA). Lilia Canché, Graciela Cohuó y Edwin Díaz, son colaborares que brindaron tiempo y dedicación para acompañar en el proceso creativo de los infantes.
Durante el primer semestre del 2017, se llevó a cabo taller de reconocimiento del entorno y dibujo. Participaron 30 niños y niñas, la mayoría hablantes de lengua maya. En el lapso del taller de Reconocimiento, los niños y niñas dialogaron con personas mayores de sus comunidades.
En Opichén, con la señora Felícitas Chan Ek y con el señor Víctor Ché Chan; en Kinil, con los señores Lourdes Ucan Uc y Oswaldo Cohuó Collí. El diálogo con los mayores tiene razón en crear vínculos con la generación adulta, de tal manera se establezca un puente para la transmisión de saberes y conocimientos. Posterior a cada conversación, los infantes eligieron los aspectos más sobresalientes y se dispusieron a plasmar la oralidad vertida por los invitados mayores. Es así, que en cada dibujo encontrarán una ficha que alude al fragmento en el que se basó la obra pictórica.
En el segundo semestre del 2017 se produjeron los cuatro cortometrajes. En ellos, los niños y niñas muestran su forma de vivir en los diferentes paisajes, siendo los personajes principales de cada obra. Para ello se observó y se indagó de los temas más sentidos por los niños y niñas, así como el gusto por la narrativa cinematográfica más afín.