Instalan equipo para concierto en Chichén

INAH vigila que se cumpla el protocolo de protección del patrimonio

Mérida, Yucatán, 1 de febrero de 2018.- A una distancia de 20 metros de la Pirámide de Kukulcán se ha instalado el escenario y la infraestructura de sonido e iluminación para el concierto del cantautor yucateco Armando Manzanero en Chichén Itzá, sin que hasta el momento se hayan reportado incidentes o daños al patrimonio.

El director de esta zona arqueológica, Marco Antonio Santos Ramírez declaró que el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) está vigilando que la compañía organizadora del evento cumpla al pie de la letra el protocolo de protección de los edificios prehispánicos.

“Estamos trabajando de la mano de la empresa, para que se siga el protocolo de operación que están obligados a ejecutar. Estamos supervisando punto por punto para la protección del patrimonio cultural”, señaló.

Dijo que desde el lunes iniciaron con los preparativos y montaje del escenario para el concierto de Manzanero, labores que se realizan por las noches para no afectar el flujo de visitantes en el sitio arqueológico.

Para mañana viernes se tiene programado que el cantante y sus músicos realicen un ensayo general en Chichén Itzá, ya que el concierto está programado para el próximo sábado.

Santos Ramírez explicó que ya se ha instalado el escenario, así como el equipo de iluminación y de sonido, áreas que están acordonadas, como marca el protocolo.

El director indicó que no ha habido inconvenientes ni daños a los edificios, “todo marcha sin novedad, estamos vigilando personalmente que se cumpla al pie de la letra, se están ajustando a lo que el Consejo de Arqueología señaló para la autorización del concierto”.

Precisó que a la empresa se le aprobó que puedan ingresar 5 mil 200 personas como público para el recital homenaje a Manzanero en Chichén Itzá.

En otro tema, indicó que no tiene información sobre posibles protestas de trabajadores del INAH en ese sitio arqueológico, pues como se sabe, tanto académicos, empleados e investigadores se han opuesto a la realización del evento.  (Herbeth Escalante)