Pues después de los pobres resultados electorales que obtuvo el PRI en las pasadas elecciones del 1o. de Julio y que provocaron que perdiera el gobierno del Estado, nuevamente Mérida y por lo menos 30 municipios del interior del Estado, es obligada una recomposición hacia sus entrañas y por lo pronto, ya decidieron que no habrá cambio hasta en tanto no termine su administración el gobernador Rolando Zapata Bello.
Lo que si dejaron en claro algunos grupos al interior de ese partido es que quien sea, deberá ser alguien con rostro ganador ya que sería una «pésima lectura» recurrir algún actor político derrotado y por ende surgieron nombres de liderazgos que tendrán derecho a voz y voto; Jorge Carlos Ramírez Marín, Liborio Vidal Aguilar, Felipe Cervera Hernández, y Pablo Gamboa Miner.
Al parecer la idea es que esos personajes puedan opinar y aportar ahora que el PRI vivirá su peor época sin mayores espacios políticos no solo en Yucatán sino a nivel nacional.
De entrada ya vetaron nombres de cercanos a Víctor Caballero Durán y por otro lado, ya piensan en figuras que puedan unir al priismo yucateco y entre ellos, la Secretaria general de gobierno, Martha Góngora Sánchez, a quien no solo le tocó el cierre y período de transición de un gobierno a otro sino que será la que literalmente cierre la puerta del palacio de gobierno para los priistas, al menos en el sexenio que iniciará el próximo 1o. de Octubre.
Góngora Sánchez se antoja -dicen algunos priistas de peso- un buen perfil para la brega que le vendrá a ese partido si quiere subsistir y resurgir. (desdeelbalcon.com)