Sahuí dijo que «al PRI siempre lo han dado por muerto, pero se recuperará». Caballero aceptó que su derrota fue decisiva en elección estatal
Mérida, Yucatán, 18 de agosto del 2018.- Tras haber perdido en las pasadas elecciones por la gubernatura del Estado y la alcaldía de Mérida, respectivamente, aparecieron en la escena pública Mauricio Sahuí Rivero y Víctor Caballero Durán. Ambos aseguraron que al tricolor “siempre lo han dado por muerto” pero se recuperará en los siguientes comicios y que esperarán las indicaciones de los dirigentes priístas para continuar en la función pública.
Al ser abordado por la prensa, Sahuí Rivero aseguró que la derrota del PRI a nivel nacional es un llamado a la reflexión, pero en el caso estatal “hay un priísmo responsable” que marcará un reto para la siguiente administración, ya que la situación del estado deberá mejorar en los próximos años.
Señaló que se deberá hacer un diagnóstico objetivo para saber por qué el ciudadano decidió no votar por el partido. Eso sí, indicó que lo importante fue la copiosa participación ciudadana en la jornada electoral.
A su vez, recalcó que el tricolor se recuperará de la caída ya que “siempre lo han dado por muerto” pero cuenta con militantes talentosos que “quieren seguir haciendo las cosas bien por el estado”.
También comentó que tras conocer los resultados de las elecciones se dedicó a su familia y a planear proyectos de formación académica y personal. “Todo pasa para bien y al final del día lo que tenemos que hacer es asumir la tarea que nos toca para hacer posible que el estado siga avanzando”, dijo.
Finalmente, añadió que esperará los tiempos del partido y lo que ocurrirá en las siguientes semanas para continuar en el servicio público, pero afirmó que seguirá siendo un observador político como ciudadano y militante del PRI, además de que contempla la posibilidad de reintegrarse al ámbito académico y a otros proyectos privados.
Por su parte, Caballero Durán impactó a los simpatizantes del tricolor por su cambio de imagen, ya que reapareció con una notable barba. Admitió que el bajo número de votos obtenidos en Mérida fue determinante en la elección estatal pero que las causas que originaron esa situación fueron múltiples.
Afirmó que sin importar a qué candidato hubieran puesto para la alcaldía de Mérida el PRI hubiera perdido ya que la ciudadanía tanto a nivel estatal como nacional “quería un cambio”. Eso sí, negó que se hubiera previsto que el partido perdería ya que “las encuestas decían lo contrario”.
De igual forma, aceptó que se cometieron muchos errores durante la campaña pero que ninguno fue importante ya que la derrota fue “contundente”. “Si hubiéramos tenido una derrota más cerrada esos elementos hubieran tenido mayor peso”, subrayó.
El ex candidato expresó su confianza en que el tricolor se recupere en las siguientes elecciones ya que las cosas cambian de un proceso electoral al otro y en los siguientes años “la gente no va a estar atenta del PRI sino de los que ganaron”, por lo que ahora serán otros partidos los que deberán cumplir con la expectativa de la ciudadanía.
Agregó que los priístas deberán prepararse para los siguientes comicios vigilando a los funcionarios, ya que el comportamiento de algunos servidores públicos hizo que la gente aplique el voto de castigo. “Hay que empezar a preparar a los cuadros para que sean más profesionales”, puntualizó.
Finalmente, indicó que continuará militando en el tricolor y que estará pendiente de las indicaciones de la dirigencia del partido para desempeñar la encomienda que le dejen. (Lilia Balam)