Aerogeneradores y aspas del Parque Eólico llegarán por Progreso

El proyecto eólico impulsaría empleos temporales para pobladores de Dzilam de Bravo, que se ajustarían a los tiempo de veda de pesca.

Mérida, Yucatán, 31 de marzo de 2014.- Los aerogeneradores y aspas que se requerirán para levantar la infraestructura del Parque Eólico de Dzilam de Bravo llegarían importados de fábricas europeas o norteamericanas, ingresando por el puerto de Progreso.

De esta manera, se pretende que con el proyecto eólico se genere una derrama económica mayor en la entidad, señaló Benigno Villareal del Río, director de la empresa Vive Energía, encargada de construir y operar esa planta.

En entrevista, dijo que parte de la infraestructura del parque, como los aerogeneradores, aspas y tubos que sostendrán estos elementos,  serán suministrados por una empresa danesa, y serán trasladados de alguna de sus plantas europeas o de Estados Unidos hacia Progreso.

Recordó que estos materiales que se utilizan para levantar parques eólicos en todo el país ingresan por lo general en puertos de Veracruz, pero para este proyecto se acordó que lleguen a la costa yucateca, y de esta manera favorecer la derrama económica de la comunidad local.

El Parque Eólico de Dzilam de Bravo empezará a construirse en septiembre de este año, una vez que finalicen los estudios ambientales y análisis de seguimiento que solicitó la Semarnat a Vive Energía, como parte de las condicionantes para la autorización de la obra.

Empezaría a operar formalmente en septiembre del 2015, suministrando de energía como pequeño productor a la Comisión Federal de Electricidad, y también servirá de autoabasto  a empresas privadas mexicanas del ramo industrial y comercial.

“Estas empresas se beneficiarían con energía renovable, lo que les permitirá formar parte del esfuerzo global para combatir al cambio climático, pero además podrán tener acceso a energía económica que les permitirá  que sean  más competitivos en  su mercado nacional o global”, indicó Villareal del Río, quien por cierto, dijo que muchas de estas empresas ya están establecidas en Yucatán, pero no descartó que otras aterricen al estado una vez que el parque empiece a operar.

“No olvidemos que sin energía no hay desarrollo, por lo que considero que el proyecto eólico de Dzilam de Bravo viene a contribuir en el reto que tiene la Península de Yucatán para fortalecer su sistema eléctrico, y aspirar con el tiempo a que lleguen más industrias porque habrá mayores cantidades de energía, y a la vez, éstas  generen más empleos”, añadió.

El empresario hizo énfasis en que durante los 20 años que tendrá de vida útil el Parque Eólico se detonará la economía local, principalmente de las comunidades de Dzilam de Bravo, Dzilam González y Temax, sobre todo a través del concepto de empleo temporal.

En ese sentido, recordó que se contratarán a 250 personas de dichos municipios de manera temporal durante los 10 ó 12 meses que se construya la obra, pero que también se tiene contemplado solicitar los servicios de pobladores para otras tareas.

Dijo que durante dos décadas se contratará personal a través de programas de empleo temporal, ajustándose a los periodos de veda de pesca, para que las personas que se dedican  a la actividad pesquera puedan tener otros ingresos económicos al ser contratados por Vive Energía.

“Se dedicarían a la limpia de caminos, chapoleo para la línea de transmisión, reforestación o rescate de flora, acondicionamiento de terrenos para ser lo más amigable a la fauna local, entre otros empleos, para que los pobladores de Dzilam de Bravo, Dzilam González y Temax no se afecten económicamente en los tiempo de veda, ya que la actividad principal en esas comunidades es la pesca”, finalizó. (Herbeth Escalante)