Y en caso de ser necesario, cancelaría el Tren Maya si pobladores se oponen a su construcción
Cancún, Quintana Roo, 10 de noviembre de 2019.- El presidente Andrés Manuel López Obrador visitó este sábado Quintana Roo, donde por la tarde, en un encuentro con pueblos indígenas, hizo dos promesas sobre temas polémicos: liberar al exgobernador Mario Villanueva y cancelar el proyecto del Tren Maya en caso de que haya oposición de pobladores.
Acerca de Villanueva, aunque sin mencionar su nombre, dijo que su gobierno ya busca de manera legal cómo ponerlo en libertad debido a su edad.
«Ya estamos interviniendo para que se libere al ex gobernador de Quintana Roo. Ya lo habíamos logrado, pero es que ahora ya no es como antes, ahora existe la Fiscalía de la República, antes era la Procuraduría de la República; bueno, antes el procurador dependía del presidente, ahora la fiscalía es autónoma y nosotros somos respetuosos de esa autonomía… Vamos ahora a seguir con la gestión y es mi compromiso de que va a quedar en libertad», señaló.
El presidente relacionó este caso con la Ley de Amnistía que propuso al Congreso. Aseguró que esta norma plantea que «ya la gente mayor que está en los reclusorios, gente que no ha sido sentenciada durante años, indígenas que no tuvieron defensa y que están ahí de manera injusta, a todos esos les dará libertad».
Según medios locales el mandatario fue recibido en Felipe Carrillo Puerto por ciudadanos de varios municipios, muchos de ellos pertenecientes a la Fundación Mario Villanueva, quienes mostraron mantas para exigir su libertad.
Villanueva gobernó Quintana Roo entre 1993 y 1999 y fue detenido en Cancún en mayo de 2001. Entonces, fue sentenciado a seis años de cárcel por lavado de dinero.
Aunque fue liberado el 21 de junio de 2007, a las puertas del Reclusorio Norte de Ciudad de México volvió a ser capturado a petición de Estados Unidos, que lo reclamaba en extradición.
En junio de 2008, un juez lo condenó a 36 años de cárcel por narcotráfico, pero en marzo de 2009 otro tribunal anuló la sentencia. En 2010, fue enviado a Estados Unidos y en enero de 2017 regresó a México para terminar su sentencia.
En septiembre de este año, la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, dijo que el exgobernador podría cumplir en casa lo que le resta de condena porque cumple los requisitos que solicita la ley para acceder a ese beneficio.
El Tren Maya, a consulta
Respecto del Tren Maya, un proyecto clave de López Obrador y para el que se tiene contemplada una inversión de 120,000 millones de pesos, el presidente insistió en que la obra se someterá a consulta; incluso, prometió cancelarla si los pobladores son quienes la rechazan.
En cuanto a figuras públicas que se oponen al Tren Maya, calificó a estos sectores de oposición «conservadora, de lo más chueco que pueda haber, latosa».
«Si vamos a empezar a hacer el tren, que ya estaríamos en condiciones de iniciar con las obras el año próximo y a convocar a las empresas en diciembre, lo que llaman licitar, no quisiera yo, se los digo así con toda franqueza, que por mezquindades comiencen a llover los amparos y se detenga la obra y que no la terminemos en tres años, que termine yo mi gobierno y quede a medias esa obra; si es así, mejor no la inicio, porque no voy a dejar una obra inconclusa», dijo.
López Obrador aseguró que esta obra no afectará al medio ambiente ni al desarrollo de los pueblos, y reiteró su compromiso de cuidar la naturaleza y el patrimonio cultural de los mexicanos, pues, afirmó, su gobierno no es «irresponsable ni depredador».
El Ejecutivo solicitó a Adelfo Regino, director del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI), que haga la consulta sobre el tren lo antes posible. Para «medirle el agua a los camotes», según dijo, pidió a los pobladores que a mano alzada se pronunciaran sobre la obra. Así, a mano alzada, los pobladores avalaron el proyecto.
Agencias