Andrés, el Cristo de Acanceh

«En mi comunidad recibo veladoras y bendiciones, en mi salón de clases algunas burlas y chistes», explicó el joven actor.

Acanceh, Yucatán, 19 de Abril de 2019.- El joven católico Andrés Antonio Medina Chale de 23 años de edad, será el encargado de representar —por cuarta ocasión— a Jesús, en el municipio de Acanceh en la edición número 38 de la Pasión de Cristo. Además cargará una cruz de 120 kilogramos y será azotado por algunas horas.

Medina Chale interpretando a Dios.

Andrés —evidentemente emocionado— asegura que no tiene palabras para describir su sentir.

“Para mí es algo emociónate, y hay ocasiones que ni yo mismo me lo creo, no es algo que pueda explicar con mis palabras. Más que en la mente lo llevas en el corazón, el saber que vas a representar a la persona ‘más perfecta’ que pudo existir”, dijo el joven religioso.

Andrés es un joven de complexión delgada, su cabello era lacio y corto, pero para interpretar el papel de Jesús —el Rey de reyes, el Señor de señores, el Señor de los ejércitos, Abbá, el Altísimo, Jehová o la Luz del mundo, o como sea nombrado—, tuvo que dejárselo largo, y ondulárselo, con la intención de parecerse lo más posible a la imagen cristiana.

Aunque es la cuarta ocasión que hace el papel de Cristo en Acanceh, señaló que interpretar a este personaje era un sueño que tenía desde niño, cuando acudía a la plaza del pueblo y veía las representaciones en aquellos años.

“Algunos pequeños se burlaron de mi, cuando decía desde niño que quería interpretar a Cristo; más tarde los coordinadores de la iglesia me eligieron, sin imaginar que sería de los más jóvenes en interpretarlo; los anteriores actores solían tener entre 28 o 30 años, mientras que yo empecé a los 19 años de edad», explicó

Andrés, estudia Mercadotecnia en la Universidad Mesoamericana de San Agustín (UMSA) en Mérida, a pesar que en su comunidad las personas lo bendicen, le llevan veladoras a su casa y le dicen que lo incluirán en sus oraciones; en su escuela, sus compañeros de clase bromean “si tu eres Dios, haz un milagro y que nadie repruebe«, refirió.

“Siento que la vida de la ciudad es muy diferente a la de un pueblo, algunos de mis compañeros me entienden pero no todos, varios me burlan; si tu eres Dios, entonces saca buenas calificaciones —me dicen—», explicó con una sonrisa.

¿Te duelen los azotes que recibe durante la representación?

“Los golpes no los puedes evitar, son necesarios, a algunos actores les gana la emoción y te dan más duro; sólo es cuestión de aguantar, no hay de otra», finalizó.

Javier Escalante Rosado.