Durante un encuentro en Chacsinkín, con los Guardianes de las Semillas, afirmó que prefiere “salir e ir a los poblados, que permanecer en las parroquias»
Mérida, Yucatán, 30 de marzo de 2019.— Según personas cercanas al actual arzobispo de Yucatán, Gustavo Rodríguez Vega, él es un hombre que —a diferencia de los anteriores— prefiere pasar el tiempo visitando las comunidades más apartadas de la entidad. Este viernes se reunió con los Guardianes de las Semillas y asistió a más de una decena de comisarías como parte de su visita pastoral que comenzó el pasado lunes y concluye el domingo 31 de marzo.
Durante una reunión en Chacsinkín, el líder de la iglesia católica expresó que los los Guardianes de las Semillas le comunicaron su preocupación sobre la contaminación del manto freático y la afectación que puede generar a su producción de maíz, ibes, frijoles, y calabaza, pero sobre todo a su salud.
“Prefiero salir e ir a las poblados, que permanecer adentro de una parroquia esperando que los feligreses lleguen, ahí es donde me entero realmente de sus preocupaciones más allá de lo religioso”, afirmó en referencia a su reunión con los hombres y mujeres de mencionada agrupación.
En ese sentido dijo que aunque “algunos empresarios se enojen” él está a favor de la conservación de los recursos naturales, “vivimos una época en donde necesitamos hacer una ‘conversión ecológica’ más allá de la fe cristiana; es necesario que como iglesia defendamos el agua”, afirmó.
Cabe mencionar que a través de un comunicado emitido en noviembre del 2018, Rodríguez Vega aseguró que la Iglesia debe continuar con “una postura firme” para evitar la contaminación del agua en la entidad, en referencia al conflicto entre habitantes y la mega granja porcícola asentada en Homún; criticó que “extranjeros y connacionales envidian nuestros cenotes”, y que empresas han provocado la escasez o contaminación del agua en la entidad, afectando principalmente a las comunidades mayas.
“El obispo no debe interesarse sólo por lo estrictamente religioso, en mi caso estoy a favor que la gente decida y que tome sus propias decisiones por el bien de sus comunidades”, señaló.
Bajo la anterior premisa, cabe recordar que en junio del año pasado, el arzobispo “respaldó” el proceso jurídico que inició Grupo Indignación en Kimbilá, después de interponer un amparo y una queja ante Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) que logró detener la construcción de un mercado sobre una cancha de fútbol, argumentando que nunca se le consultó al pueblo sobre la obra. Posterior al juicio legal, Rodríguez Vega acudió a al sitio a “darle su bendición”, acto que fue dado a conocer a través de un comunicado de Grupo Indignación.
Además durante su estancia en los municipios visitó centros de salud, parques y varias iglesias.
Su visita pastoral inició en la iglesia de San Pedro Apóstol y San Miguel Arcángel, en el municipio de Chacsinkín y de Tixméhuac. Además visitó las comisarías de Xnohuayab, Xoy, Xbox, Chaltan Pujuy, Nenelá, Sabacché, Xcojil, Sisbic, Kimbilá y Dzutoh.
Se espera, que su gira por el interior del estado concluya el domingo 31 de marzo, con una misa en la iglesia de Chacsinkín. En Mérida se quedó a cargo el arzobispo auxiliar Pedro Mena Díaz.
Javier Escalante Rosado