Autoridades yucatecas están en negociaciones con el Gobierno Federal para determinar su operación
Mérida, Yucatán, 17 de febrero de 2020.- Durante la comparecencia de funcionarios públicos en el Congreso del Estado, el titular de la Secretaría de Salud (SSY), Mauricio Sauri Vivas reveló que su administración cerró el expediente técnico de la cámara hiperbárica instalada en el hospital Agustín O´Horán, y que se encuentran en pláticas con el Gobierno Federal, para determinar su futuro.
Como hemos informado, durante la administración de Ivonne Ortega Pacheco se adquirió esa cámara hiperbárica con capacidad de 23 plazas, y se invirtieron 81 millones de pesos. Sin embargo, 10 años después no ha sido puesta en marcha, ni ha tenido un sólo usuario beneficiado.
Ante el cuestionamiento de legisladores, Sauri Vivas reconoció que el proyecto de la cámara hiperbárica “fue mal planeado”, y que se trata de un problema “heredado” por gobiernos estatales anteriores.
Sin embargo, reconoció que luego de 10 años, se ha terminado el expediente técnico que se requiere para determinar su futuro en el hospital, y que se encuentran en pláticas con el Gobierno de la República “para saber si es viable que opere o no en Yucatán”.
El diputado panista Manuel Díaz Suárez, cuestionó sí la cámara fue donada o no, a quién, cuánto costó, si se trata un acto de corrupción y qué se necesita para que funcione; no obstante Sauri Vivas no respondió al legislador.
En cuanto a la cámara hiperbárica se realizaron todos los trámites para la modificación de la estructura médica, y capacitaron al personal de servicios hiperbáricos, ante la desaparición del Seguro Popular, están a la espera que el Instituto de Salud del Bienestar (INSABI) financie el programa.
HOSPITAL DE TICUL
En otro sentido legisladores de Morena y el PRI, preguntaron al funcionario público si tienen planes para “rescatar” el Hospital de Ticul, que fue abandonado desde el 2014.
En ese sentido, Sauri Vivas se limitó a contestar que el nosocomio se encuentra en un proceso de resolución de litigio y por el momento no pueden tomar una decisión “hasta que finalice el procedimiento legal”.
ANTECEDENTES
El conflicto entre Infraestructura Hospitalaria de la Península (IHP) y el gobierno yucateco se inició en 2015, cuando la administración de Rolando Zapata Bello canceló el contrato de PPS con esa empresa, debido a los continuos atrasos en la entrega de las obras.
La empresa no aceptó esa decisión y acudió a la Cámara de Comercio Internacional, con sede en París, para apelar las diferencias. Este organismo falló a favor del constructor y ordenó al gobierno yucateco pagarle $746.2 millones por la rescisión del contrato para la construcción del Hospital de Ticul, según el último cálculo hecho en 2018.
El gobierno yucateco no la aceptó y pidió que el caso se resolviera en los tribunales locales. Pero el IHP no aceptó esta resolución y amenazó con llevar el caso a la Suprema Corte de Justicia.
Javier Escalante Rosado