Casos de contaminación y deforestación son competencia federal: SDS

Sobre la supuesta devastación forestal por construcción de plaza comercial en el norte, aseguran que no existe denuncia alguna.


Mérida, Yucatán, 22 de marzo de 2019.- Sobre el caso de Kinchil y Celestún, cuyos pobladores denuncian que la empresa Kekén contamina el manto acuífero, la secretaria de Desarrollo Sustentable (SDS), Sayda Rodriguez Gómez, precisó que se trata no solo de un problema ambiental sino también de un proceso administrativo.

Indicó que el tema es complejo, por ello, “no vamos a generar soluciones que no tengan impacto en el largo plazo; estamos trabajando en una estrategia estatal hídrica que genere normas basada en el conocimiento científico para dar solución a las demandas de estos pobladores”.

Adelantó que la dependencia estatal trabaja en el Plan de Manejo de la Reserva de Cenotes, el cual se aplicará en todo el estado y buscará normar el manejo de residuos y brindará estrategias de conservación de estas reservas hídricas.

Respecto a la contaminación que aseguran pobladores de Kinchil y Celestún genera la cita empresa porcicola al vertir heces y orina a las reservas de agua, la funcionaria estatal recalcó que no existe una sola fuente de contaminación, ya que el manto freático es permeable en todo el Estado, por ello, “lo que el Gobierno del Estado hace para seguir garantizando la calidad del agua es un plan integral, que atiende no sólo a un sector productivo y a una sola comunidad, sino a todo el entorno socioeconómico y a una región completa”.

Referente a este caso, Sayda Rodríguez afirmó que el Gobierno del Estado no puede imponer sanciones por el mal manejo de residuos sólidos porque corresponde al Gobierno federal, “pero como administración estatal diseñamos planes de manejo de desechos, ofrecemos capacitación y generamos condiciones socioeconomicas e infraestructura para reducir las fuentes de contaminación”.

En cuanto al centro comercial que se planea construir en la carretera Mérida-Progreso, cerca de Komchén, dijo estar enterada del asunto a través de los medios de comunicación y precisó que se trata de un asunto de competencia federal.

“La autorización para este tipo de desarrollos en un área natural protegida viene de la Semarnat, por eso desconoemos si existe en realidad este proyecto y si tiene autorización, pero lo que si puedo asegurar que hasta este momento no existe queja o denuncia sobre este tema”.

Cabe señalar que ayer, el Consejo Maya del Poniente de Yucatán Chik’in Ja’ informó que ya presentó una denuncia ante la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA), la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) y ante la Secretaría de Desarrollo Sustentable por la contaminación de la empresa porcíciola “Kekén”, ubicada en las tierras ejidales de los municipios de Kinchil y Celestún.

Este grupo asegura que los daños ambientales lo generan heces y la orina de los cerdos, los cuales van al manto acuífero, el cual dicen es muy frágil en esa zona del poniente del estado, y que termina afectando a apicultores, vegetación, cenotes, humedales y la salud de las personas.

Asimismo, alertan que el cárcamo de agua potable de Celestún se ubica a 7 kilómetros de la laguna de aguas negras que se ha formado por los desechos y la falta de tratamiento de las excretas de los cerdos. (Jorge Euán).