Científica yucateca desarrolla vacuna contra el Chagas

Actualmente, no existe un tratamiento efectivo contra la enfermedad en su fase crónica

Mérida, Yucatán, a 15 de diciembre de 2019.- El mal de Chagas afecta a más de siete millones de personas en el mundo, por ello es una de las 20 enfermedades que la Organización Mundial de la Salud considera como desatendidas y que impactan de manera relevante en la calidad de vida de los pacientes y sus familias.

La Secretaría de Salud Federal reporta que los casos de Chagas en Yucatán se dispararon en 2019, pues pasó de tres a 27 contagios, todos en fase crónica. A nivel nacional, el total de contagios es de 53 en fase crónica y ocho en fase aguda; el año pasado, el total de casos de mal confirmados en la entidad fue de 62.

Por ello, investigadores yucatecos trabajan de manera multidisciplinaria en la creación de métodos de diagnóstico clínico, avances en la investigación de la enfermedad y estrategias de concientización.

En este trabajo científico destaca Cristina Fátima González López, egresada de la de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY), quien desarrolla una investigación en torno a una “Proteína Multi-etíope”, la cual tiene potencial para convertirse en vacuna contra el mal de Chagas, padecimiento para el que en la actualidad no existe un tratamiento efectivo en su fase crónica.

Con esta tesis, González López obtuvo el Premio “B. Medina”, que se otorga al mejor trabajo de titulación de Licenciatura en la Facultad de Ingeniería Química. Este año fueron admitidas un total de 27 tesis para el escrutinio de un grupo colegiado, y debido a la calidad de los documentos recibidos, además del premio principal se concedieron otras cinco menciones honorificas.

“Esta enfermedad en la fase crónica daña los tejidos de los órganos como el corazón, sistema digestivo, entre otros, y algunos casos llegan a la muerte del portador de este mal, por esta razón, que exista la posibilidad de una vacuna es realmente relevante para la sociedad”, explicó.

A través de la investigación y posible desarrollo de la vacuna se aportaría una protección accesible en los países con mayor incidencia de esta enfermedad, sobre todo en regiones como Sudamérica, Centroamérica y México, territorios en los que se estima que hay alrededor de 20 mil muertes anuales.

La investigación fue posible gracias al trabajo en conjunto de la Facultad de Ingeniería Química, el profesor investigador del Centro de Investigaciones Regionales “Dr. Hideyo Noguchi”, Vladimir Cruz Chan; y el Baylor College of Medicine de Houston, Texas.

Jorge Euán