Triste final para 7 personas que buscaron su muerte al ingerir licor adulterado y sobre todo en tiempos de pandemia y en que está vigente un decreto sobre Ley Seca.
La Fiscalía General del Estado (FGE) ya abrió una carpeta de investigación sobre los hechos en que 11 personas fueron ingresadas al IMSS del municipio de Acanceh y otras más en el Hospital O’Horán luego de presentar estragos por el licor ingerido la noche anterior.
Uno de ellos -relata el parte del IMSS- llegó a la clínica de Acanceh prácticamente ciego y agonizando, por lo que llamó la atención los estragos que causó en esa gente la bebida que tomaron la noche anterior y, que al parecer, de manera clandestina les vendieron en 70 pesos cinco litros.
Verdadero drama para los habitantes de la pequeña comisaría de Acanceh que vio como 11 obreros u trabajadores de la comunidad se reunieron para ingerir ese «licor» y acabaron dejando viudas a sus esposas y huérfanos a sus hijos.
La FGE espera el parte de los estudios químicos y de laboratorio para conocer a ciencia cierta qué componentes tenía ese licor y de dónde provino. Aunque aún no hay detenidos, se espera que la investigación llegue hasta los responsables de la venta clandestina de aguardiente que provocaron la muerte de esas 7 personas y que otras 4 se encuentren aun luchando por sus vidas.
El resultado de la investigación de la FGE y del gobierno del Estado será fundamental para ir desmantelando y rompiendo esos centros de vicio clandestino que ya está visto -no son un chiste- sino un peligro para cualquiera.
Desde el Balcón