Continúan obras ante restricciones por la pandemia

La Defensoría Internacional de los Derechos Humanos en Cancún denunció la violación de las restricciones impuestas en el estado

Cancún, Quintana Roo, 28 de abril del 2020.- Pese a las restricciones por la pandemia del Covid-19, han continuado obras en desarrollos hoteleros e inmobiliarios en varias partes del estado, lo cual ha sido denunciado por grupos ambientalistas. 

Una de las obras se encuentra en Puerto Cancún, donde se realiza extracción de arena para crear un frente de playa artificial en dicho desarrollo inmobiliario de lujo. 

El tema se mencionó en la conferencia matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador, quien anunció que el titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) investigará el tema. 

La obra es la Restauración y Estabilización del Perfil Costero de Puerto Cancún, un lujoso complejo residencial, condominal y comercial de 350 hectáreas con salida al mar Caribe, contiguo a la zona hotelera de Cancún. 

Los desarrolladores de Puerto Cancún ingresaron a evaluación ambiental el  27 de enero del 2017 dicho proyecto que consiste en la creación de dos dunas de arena artificiales que sumarán en total 950 metros de largo, con una altura de 1.3 metros, además tendrán obras complementarias como tres arrecifes artificiales de 75 metros cada uno; otro arrecife de 42 metros, así como tercer arrecife artificial en forma de “V” de 100 metros de longitud

También implica la colocación de dos escolleras de entre 32 y 35 metros cada una, así como la colocación de geocilindros de arena. Ello supondrá la extracción de arena de algún banco submarino para verterla sobre los casi 1,000 metros de duna artificial.

El proyecto se describe como “una inyección de arena para cubrir las dos dunas artificiales y ensanchar y mejorar 10 metros aproximadamente la playa. El proyecto incide en el polígono del decreto por el que se declara área natural protegida con el carácter de Reserva de la Biosfera en la región conocida como el Caribe mexicano”, se lee en la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA). 

Puerto Cancún se hizo famoso internacionalmente en el 2006, por el fraude cometido por la compañía que lo desarrolló, Grupo Kelly, en contra de 1,300 pensionados estadounidenses

Los reportes periodísticos de la época dieron cuenta de que el fraude se realizó bajo el esquema Ponzi, que implica el pago de altos intereses por parte de los inversionistas, en este caso los más de 1,000 pensionados estadounidenses, a cambio de una promesa de altas ganancias una vez que iniciara la comercialización del desarrollo condominal en cuestión.

En el 2012 Puerto Cancún fue saneado y adquirido por Mira Companies, de capital estadounidense.

Luego de iniciada la pandemia y decretadas las medidas de restricción por parte del gobierno del estado, el rubro de las construcción quedó categorizado como actividad no esencial por lo que los propios habitantes de Puerto Cancún denunciaron en redes sociales que se estaban violando dichas restricciones al mantenerse los trabajos de extracción de arena con maquinaria especializada en el frente de mar del desarrollo inmobiliario. 

La Defensoría Internacional de los Derechos Humanos asentada en Cancún denunció los hechos ante la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) por las obras de construcción y extracción de arena en Puerto Cancún, pero las obras no se detuvieron. 

También grupos ecologistas han denunciado trabajos de construcción en Chemuyil, Riviera Maya. Según Roberto Herrera, presidente del Comité Estatal de Protección a la Tortuga Marina, se realizan obras para la construcción de palafitos y caminos de acceso, así como la recuperación de la duna costera en una playa que es santuario de la tortuga marina. 

Los trabajos tampoco han cesado pese a las restricciones impuestas por el gobierno del estado para evitar el contagio de coronavirus. 

Agencias