Coreanos regalarán estatua a Mérida

Se instalará en Altabrisa, en una avenida que pronto se llamará “República de Corea”

Mérida, Yucatán, 11 de marzo de 2018.- En una reunión entre autoridades del Ayuntamiento de Mérida y la República de Corea se ratificó el compromiso mutuo de seguir trabajando en el desarrollo de diferentes proyectos que benefician a la ciudad y a la comunidad coreana que vive aquí. Además, se refrendó el convenio de que esa nación instale la estatua “Greetingman” en la capital yucateca.

La alcaldesa, María Fritz Sierra, recibió en la sala de juntas de la Presidencia Municipal a Han Byung Jin, cónsul general y ministro consejero de la Embajada de la República de Corea en México, quien manifestó su deseo de continuar el trabajo realizado por el embajador Chun Bee Hoo, cuya encomienda en nuestro país concluyó en diciembre pasado.

Byung Jin hizo un reconocimiento al apoyo recibido por el Ayuntamiento de Mérida a diferentes peticiones de la comunidad coreana. Hizo especial énfasis en el nombramiento de una avenida (la 7 del fraccionamiento Altabrisa) con el nombre de República de Corea.

Ahí también, celebró,  se instalará la estatua del “Greetingman” (Hombre que saluda). Este último proyecto ya aprobado por el Ayuntamiento y del que el visitante ofreció ultimar detalles para concretarlo.

El “Greetingman” se instalaría en la misma avenida República de Corea y es un obsequio que la nación realiza a diferentes países como muestra de buena voluntad, para resaltar los lazos de cooperación, paz y reconciliación.

El diplomático subrayó que Mérida tiene un significado muy especial para su país por los más de 100 años de amistad que llevan a raíz del establecimiento de coreanos en esta ciudad. Hoy, recordó, la comunidad coreana en Mérida tiene más de 2,000 descendientes que han hecho de esta ciudad su hogar.

María Fritz declaró que el nombramiento de la avenida 7 del fraccionamiento Altabrisa como “Avenida República de Corea” ha dado un mayor impulso al hermanamiento entre Mérida y el país asiático.

Al término de la junta de trabajo, la presidenta municipal obsequió al visitante una réplica en miniatura de las sillas conocidas como “confidentes”, elaborada en piedra por artesanos de Dzityá y el visitante coreano a su vez obsequió a la alcaldesa un juego de tazas de té pintado mano.

La relación entre Mérida y Corea se remonta a principios del siglo XX, cuando fue la primera ciudad mexicana en recibir a los primeros 1,033 inmigrantes coreanos que tuvieron que abandonar su país por la invasión japonesa.