Elena Martínez Bolio: entre hilos y agujas

Continúa presentando su obra “Una larga hebra” (“Jump´éel chowak kúuch”) en la Ciudad de México

Por Javier Escalante Rosado

Elena Martínez Bolio, es una reconocida artista plástica yucateca. Es nieta e hija de dos mujeres dedicadas a la costura y al tejido. Desde temprana edad, nunca imaginó que su técnica y consolidación como creadora estaría vinculada a sus ancestras, pero principalmente al hilo y la aguja.

Actualmente tiene 65 años, ha participado en innumerables exposiciones locales, nacionales e internacionales. Lo que le apasiona es el arte social, pues en sus obras se sumerge en realidades como el servicio sexual comercial, el cáncer en las y los niños, el abandono de las y los adultos mayores, las enfermedades mentales, y la violencia que viven las mujeres en las comunidades.

En una entrevista con Desde el Balcón, narró que su técnica nació por una circunstancia no planeada, un día que quería dibujar y no tenía a la mano un lápiz y papel para hacerlo.

“Jamás imaginé que esto pasaría, era el año 2005, tenía la necesidad de hacer un dibujo, pero no disponía de un instrumento para hacerlo, es más, ni un lápiz de cejas. Lo único que encontré fue un hilo y una aguja, al no tener otra opción, comencé a bordar la idea que tenía sobre la tela de mi rebozo”, recordó.

Fue en ese momento, que su técnica se creó, en vez de seguir pintando con pinceles y lápices, comenzó a hacerlo con hilos y agujas.

“Me obsesioné tanto, que lo único que esperaba al caer la noche, era despertar para seguir bordando, pues también también es meditación.  Una no puede hacerlo si no está en paz consigo misma. Una no puede bordar, si no se controla, pues se requiere ausencia de pensamientos”, explicó.

En una ocasión, ella esperaba afuera de un hospital de cancerología informes médicos de un familiar ingresado. Para pasar el rato, decidió bordar, pero ante la carencia de hilos, utilizó cabellos. Con el paso de los días, cada vez más mujeres se sumaron para aprender la técnica.

UNA LARGA HEBRA

Su más reciente obra “Una larga hebra” (“Jump´éel chowak kúuch”, en lengua maya) está siendo expuesta hasta el 28 de agosto en el Museo del Carmen ubicado en la Ciudad de México.

En esta creación hizo tres sábanas con mujeres de las comunidades de Xocén, Chichimilá y Popolá. En los textiles, todas bordaron ideas y significados personales relacionados con el “no es no”, frase que hace referencia a la importancia del consentimiento y a no permitir actitudes y acciones que las violenten.

En la obra también se habla de lo que sueñan, y de cuáles son las denuncias cotidianas que hacen. Todo este trabajo está respaldado y documentado con vídeos en su página de Youtube.

EL PODER DE LAS MUJERES

Al preguntarle cuál es el papel de las mujeres en el contexto actual, reveló que se asume como feminista, y aunque no está de acuerdo con algunas formas, dijo que es entendible el hartazgo, molestia y cancancio que tienen al salir a marchar, pues históricamente han sido violentadas.

“Es comprensible, el enojo se contagia, y las mujeres hemos estado inmersas en un ambiente violento, espero que las cosas cambien con el tiempo, y demos más paso al diálogo”, comentó.

INVITACIÓN ABIERTA

Por último, Elena criticó la reducción de los recursos destinados a la cultura, “no podemos quedarnos de brazos cruzados, tenemos que hacer algo nosotros mismos”, recomendó.

“Hay comunidades que nos están pidiendo auxilio, muchas personas viven de la fabricación de las artesanías, pero ni siquiera cuentan con los recursos para los implementos y hacer un trabajo digno”, expresó.

Por último, invitó a toda la ciudadanía, a la sociedad civil, a tomar acción, “sin importar que tan grande o pequeña sea, puede hacer un cambio”.