Esta vez sí se abrieron las puertas del sitio arqueológico, para el disfrute de aproximadamente 130 personas
Mérida, Yucatán, 22 de septiembre de 2017.- Aproximadamente 130 personas “madrugaron” para presenciar el fenómeno arque-astronómico del equinoccio de Otoño en la zona arqueológica de Dzibilchaltún, y muchos aprovecharon para cargarse de energía, ya que se observó en todo su esplendor.
En punto de las 7 de la mañana, Kin, el dios maya del sol, atravesó el Palacio de las Siete Muñecas, y debido a las condiciones climatológica, se pudo contemplar en su totalidad por media hora.
Las puertas del sitio arqueológico –ubicado al norte de Mérida- se abrieron desde las 5:30 de la madrugada, para que los visitantes pudieran observar al amanecer que el sol ilumine la puerta de este edificio prehispánico.
Esta vez, el Patronato Cultur gestionó ante el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) que permitiera el acceso a turistas y visitantes locales, pues el año pasado no se abrieron las puertas de Dzibilchaltún en el equinoccio de Otoño.
En 2016 el INAH no realizó un operativo logístico para que la gente pudiera observar el fenómeno, pues argumentó que la asistencia es escasa, y año tras año ha ido decreciendo, a diferencia del equinoccio de Primavera, cuando acuden cientos de personas.
Pero en esta ocasión, el paso del sol por el Palacio de la Siete Muñeca se pudo observar durante 30 minutos, por lo que mucha gente aprovechó para cargarse de energías o tomar fotografías al fenómeno arque-astronómico.
Cabe mencionar que ayer también se pudo observar el equinoccio de Otoño en Chichén Itzá, que consistió en el descenso de Kukulcán por la escalinata norte de El Castillo, pero sólo duró 10 minutos.
De acuerdo a datos del Patronato Cultur, acudieron aproximadamente 7 mil personas, y que por varios minutos las nubes impidieron observar paso a paso la formación de la serpiente emplumada, en este fenómeno de luz y sombra.