Gobierno Británico “congela” al dueño de Chelsea

Fue sancionado por sus vínculos con Vladimir Putin.

El Gobierno de Boris Johnson ha actuado finalmente contra el oligarca ruso más conocido en el Reino Unido: Roman Abramóvich, el dueño del club de fútbol Chelsea.

Abramóvich no podrá viajar al Reino Unido ni realizar transacciones comerciales o financieras con individuos o entidades británicas.

Todos sus activos quedan congelados, lo que supone paralizar de inmediato la posible operación de venta del club, anunciada la semana pasada por el propio Abramóvich, así como posibles fichajes.

El Chelsea, según ha aclarado el Gobierno, obtendrá una licencia para continuar con sus “actividades relacionadas con la competición deportiva”, incluido el partido de la Premier League que debía jugar este mismo jueves contra el Norwich.

El club londinense ha confirmado disponer de ese permiso. En un comunicado difundido en redes sociales, el Chelsea declara que tiene “la intención de entablar conversaciones con el Gobierno del Reino Unido sobre el alcance de la licencia”.

De esta forma el Gobierno británico anunció que ha congelado los activos del oligarca ruso Roman Abramóvich, dueño del club de fútbol Chelsea, por la “estrecha relación” que ha mantenido con el régimen ruso “durante décadas”.

El Ejecutivo de Londres publicó una lista de otros siete oligarcas a los que impone sanciones por sus vínculos con el presidente ruso, Vladímir Putin, en respuesta a la invasión de Ucrania.

“Esta relación ha incluido la obtención de un beneficio financiero o de otro beneficio material a través de Putin o del Gobierno de Rusia”, explicó Londres en un comunicado sobre Abramóvich, a quien también ha impuesto una prohibición para viajar al Reino Unido.

El multimillonario ruso compró el Chelsea en 2003 por una cantidad cercana a los 100 millones de euros y desde entonces lo ha convertido en uno de los equipos punteros del viejo continente, con 18 títulos, incluyendo dos Copas de Europa.

Tras el estallido de la guerra en Ucrania, el oligarca ha puesto en venta el club londinense.

El primer ministro británico, Boris Johnson, aseguró hoy que no “puede haber refugios seguros” para aquellos que apoyan la “feroz agresión de Putin a Ucrania”.

“Las sanciones anunciadas hoy son un paso más en el apoyo inquebrantable del Reino Unido al pueblo ucraniano. Seremos implacables en la persecución de quienes permiten la matanza de civiles, la destrucción de hospitales y la ocupación ilegal de aliados soberanos”, subrayó Johnson.

Su ministra de Exteriores, Liz Truss, indicó asimismo que estas medidas “demuestran de nuevo” que los “oligarcas y cleptócratas” no tienen “sitio en nuestra economía o sociedad”, ya que “son cómplices de esta agresión por sus estrechos vínculos con Putin”.

“Sus manos están manchadas con la sangre del pueblo ucraniano. Deberían de estar avergonzados”, agregó la jefa de la diplomacia británica.

Entre los sancionados también figuran Igor Sechin, consejero delegado de la empresa Rosneft, y Oleg Deripaska, con participaciones en el grupo En+ y cuya fortuna se estima en más de 2,000 millones de euros.

(Agencias/Desde el Balcón)