Gravarían aplicaciones digitales

Significaría una recaudación para el erario público superior a los 10 mil millones de pesos

Ciudad de México, a 9 de septiembre de 2019.- Aplicar hasta 5.0 por ciento de impuestos a aplicaciones que conforman la economía digital, como Amazon, Uber, Spotify, Netflix y similares, es una carga impositiva que no se trasladará al usuario final, además de que significaría una recaudación para el erario público superior a los 10 mil millones de pesos, mientras que los consumidores podrían obtener comprobantes fiscales, consideraron analistas.

Rolando Alamilla, gerente de investigación de mercados de The Ciu, señaló que gravar la economía digital pone “piso parejo” en reglas fiscales para todas las industrias del país, además de que no inhibe la competencia y ayuda a recomponer los números de usuarios y ganancias que obtienen dichas aplicaciones en el país.

“Un impuesto menor a 5.0 por ciento es una carga impositiva; es una forma de no afectar al usuario final. Puede funcionar, e incluso otras aplicaciones, que son integradoras de servicios, como Expedia, también están sobre ese panorama que no pagan impuestos, especificó.

A diferencia de la reciente modificación de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) a la miscelánea fiscal para que las aplicaciones de alojamiento, como Airbnb, paguen impuestos, lo que supondrá ingresos por seis mil 200 millones de pesos; la propuesta del diputado Alfonso Ramírez Cuéllar implicaría que toda plataforma digital pague gravámenes, por lo que en suma, la recaudación sería superior a los 16 mil 200 millones de pesos.

“México debe encontrar soluciones propias para atender la fiscalización de las empresas residentes en el extranjero que hoy en día prestan sus servicios en territorio nacional a través de una plataforma digital que explotan el mercado nacional y que se aprovechan de la infraestructura de la nación, pero que no pagan ninguna tarifa“, dicta la propuesta del diputado de Morena.

De acuerdo con el documento emitido por la Procuraduría de la Defensa del Contribuyente (Prodecon), la iniciativa propone que las plataformas digitales que se registren ante el Servicio de Administración Tributaria (SAT) paguen un IVA de hasta 16 por ciento sobre el total de lo que reciban de los usuarios; no obstante, para Rolando Alamilla, eso significaría que el costo se trasladaría a los consumidores.

Para Braulio Arsuaga, presidente de la Asociación Nacional de Cadenas de Hoteles (ANCH), los 6 mil 200 millones de pesos que obtendría Hacienda de gravar a Airbnb no son impuestos nuevos, son existentes, de regulación a los servicios de hospedaje, como los que pagan las cadenas hoteleras, e incluso podrían utilizarse para promoción turística de México, es decir, el dinero compensaría el fondo que usaba el extinto CPTM.

Recientemente, la estimación de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), que dio en marzo pasado, pronosticó que cobrar impuestos a plataformas digitales significaría más de 179 millones de dólares anuales para las arcas públicas.

Datos de Airbnb México precisan que las ganancias de la compañía tan sólo en el verano de 2018 ascendieron a 400 millones de pesos, mientras que en todo el año, el alojamiento a través de la plataforma, como actividad económica, ascendió a 26 mil millones de pesos, que representó más de 95 mil alojamientos y más de un millón de viajeros en el primer semestre del año previo. 

Cabe recordar que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) emitió recientemente sacó modificaciones a los Criterios de la Ley del Impuesto Sobre la Renta (ISR), en las que considera los servicios que ofrecen los anfitriones de plataformas digitales, como actividad empresarial de hospedaje, por lo que también estarán sujetos al pago de esta contribución.

En torno a los ajustes hechos por la Secretaría de Hacienda, Francisco Madrid Flores, director de la Facultad de Turismo y Gastronomía de la Universidad Anáhuac, hizo hincapié en que “éste constituye un primer paso para avanzar en la construcción de un piso parejo para la industria del alojamiento, a la vez que propiciará el fortalecimiento de la competitividad en el sector. Hay que tomar en cuenta que la industria hotelera es la columna vertebral del turismo, toda vez que el alojamiento genera el 28.3 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) turístico”.

En tanto, para Hacienda “el contrato se puede vía digital o mediante una firma y las plataformas tecnológicas, el servicio se contrata por días, es decir, se paga tarifa diaria y no se tiene un plazo mínimo para otorgar el servicio”. Ahí, la dependencia argumenta por qué los anfitriones deberán pagar el ISR.

Agencias