La denuncia fue presentada sin el cuerpo del animal, por esa razón el asesino del animal podría no ser castigado.
Mérida, Yucatán, 12 de mayo de 2019.- El asesinato de un perro en Kanasín que se viralizó en redes sociales podría quedar impune; debido a que la denuncia presentada ante la Fiscalía General del Estado (FGE) no incluyó como evidencia el cuerpo del animal fallecido, y en consecuencia no procedería la querella en contra de los sujetos que agredieron al animal.
Como se recordará, a través de Facebook se evidenció el maltrato que sufrió un canino antes de morir ahorcado; varios sujetos arrastraron el cuerpo del animal malherido por las calles, para finalmente dejarlo tirado en una banqueta. Lo que generó indignación entre los animalistas y la sociedad en general.
De acuerdo a las leyes de Protección Animal del Estado de Yucatán, señala que para proceder con alguna denuncia de maltrato animal se debe entregar el cuerpo de la víctima, así como de diversas pruebas del delito; según versiones extraoficiales los restos del animal “desaparecieron”.
La rescatista Connie Sosa, manifestó que en ocasiones hay personas que se adelantan a realizar la denuncia sin ningún asesoramiento legal, provocando que la querella no proceda ante la Fiscalía.
Indicó que cuando se interpone una denuncia, se tiene que congelar el cuerpo del perro o gato para que el veterinario de la FGE lo analice y puedan deslindar responsabilidades.
Lamentó que esta situación frustró las intenciones de otro grupo de rescatistas, ya que incluso habían convencido a la dueña del animal para que testificara, a pesar de las amenazas que recibió por parte de los agresores.
Agregó que será muy difícil que la primera la denuncia que llegó a la Fiscalía de Kanasín proceda, porque el cuerpo fue arrojado a un basurero, “y nadie va a querer meterse a ese sitio para buscar entre cientos de bolsas negras al animalito”, explicó.
Manifestó que conforme pasan las horas y los días, el hecho va desapareciendo en los medios de comunicación, y los testigos prefieren no declarar.
Connie mencionó que la FGE es omisa, “la autoridad pide no solo la presencia de los testigos, sino también videos y evidencia clara del ilícito”, cuestionó.
Mencionó que sucede como cualquier otra denuncia, al no sustentar bien los hechos del delito, los presuntos delincuentes pueden quedar sin cargo alguno y seguir libres delinquiendo.
Hizo un llamado a todas las rescatistas y la gente en general que se asesore, que busque a rescatistas con conocimiento como Silvia Cortes fundadora del albergue Evolución Animal, para saber como proceder con legalmente en estos casos.
También pidió que además de vídeogravar cualquier el maltrato animal, es necesario defenderlos y no ser indiferentes ante la violencia.
Expresó que muchos de estos actos son justificados para no actuar contra los abusadores de animales, como el caso del perro que un hombre tiró al mar en el puerto de Chicxulub, y que nadie defendió, porque según la persona padece de sus facultades mentales, “¿entonces habrá que esperar a que violente a un niño, mujer u otra persona para hacer una denuncia?”, preguntó.
Finalmente dijo que publicar un video en redes sociales no es suficiente, sino hay que actuar y denunciar estos hechos.
De acuerdo con el artículo 409 del Código Penal de Yucatán, quien cometa actos de maltrato o crueldad en contra de un animal doméstico que provoquen la muerte, se le interpondrá la pena de 6 meses a 2 años de prisión y de 200 a 400 días de multa, es decir de 16 a 32 mil pesos.
También se establece que en caso de que se haga uso de métodos que provoquen un grave sufrimiento a la víctima, la pena se aumentará en una mitad.
Verónica Camacho