La violencia hacia personas trans aún después de morir

Foto: Cortesía.

Revelan poca capacitación de autoridades en temas de género

Mérida, Yucatán, 27 de octubre de 2020.- Patsy España Chan será recordada por haber luchado en vida a favor de los derechos de la comunidad LGBT, sin embargo, después de haber fallecido en un accidente automovilístico, la Fiscalía General del Estado (FGE) violentó su derecho a elegir, memoria y cuerpo, pues se negaban a aceptar que jurídicamente era una mujer.

España Chan fue activista y recientemente incursionó en la política, siempre con una visión de respeto para las minorías. El domingo pasado, horas antes de su muerte, recibió una constancia que la haría aspirante a una diputación. 

Ariadna Miranda Fajardo, mejor conocida como Miranda Sodi, narró a Desde el Balcón, que su amiga, en gran parte de su vida, fue discriminada por las autoridades, pues en varias ocasiones el Registro Civil local le negó hacerse el cambio de identidad de género, por lo que se vio en la necesidad de ir hasta la Ciudad de México para hacer el trámite jurídico que la avalaba como una mujer.

Durante la entrevista, lamentó que tras su muerte, la falta de sensibilidad de las autoridades, la ignorancia y la poca capacitación en temas de género, hicieron que los servidores públicos de la FGE retrasen la entrega del cuerpo por más 24 horas debido a que no querían asentar en el acta de defunción que Patsy era una mujer y no un hombre como ellos afirmaban.

“Fue algo terrible, mi amiga gran parte de su vida luchó por ser una mujer hasta que lo consiguió legalmente, no obstante, era inaceptable que a la hora de su fallecimiento, asentaran en el acta de defunción que se trataba de un hombre, solo porque un grupo de personas así lo quería”, comentó.

Expuso que las autoridades estigmatizaron el cuerpo y ejercieron violencia de género aún muerta, pues si bien el parte médico debía indicar que su cuerpo biológicamente era de un hombre, en el acta de defunción se debía asentar que se trataba de una mujer, pues tenían los documentos de un juez de la capital del país que lo avalaba.

Por esos atrasos, los restos mortales de Patsy fueron entregados este lunes pasado a las 16:00 horas, y enterrados a las 19:00 horas, en su municipio natal de Halachó.

GESTIONES LOCALES Y NACIONALES

Miranda Sodi explicó que familiares y amistades tuvieron que recurrir al colectivo Yucatrans, encabezado por Abigail Trillo Herrera, a las diputadas locales de Movimiento Ciudadano, Milagros Romero Bastarrachea y Silvia López Escoffié, así como con la legisladora del PRD, Diana Sánchez Barrios (primera diputada trans en la CDMX) para hacer las gestiones necesarias ante el Gobierno del Estado de Yucatán.

“Fueron muchas personas quienes ayudaron para destrabar el asunto, nadie lo hizo por un tema político, todas las personas que nos ayudaron lo hicieron por la sensibilidad y humanidad que les caracteriza, y porque conocían el trabajo a favor de los derechos humanos de Patsy”, aclaró. 

PROYECTO PATSY

Agregó que por la prontitud del entierro no pudieron despedirla como se debe, no obstante, comenzarán a organizar entre la comunidad LGBT el “Proyecto Patsy”, para que ninguna mujer u hombre trans, sufra discriminación aún después de su muerte.

“Tenemos que hacer algo, el Proyecto Patsy servirá para que nuestros derechos como personas trans sean respetados en todo momento, aún por personas que desconocen la ley, y que tienen estigmas hacia nosotras”, advirtió.

Aunque trascendió que esta situación llegó a oídos de la secretaría general de gobierno, María Fritz Sierra, quien intercedió en el caso, Miranda Sodi, pidió al titular de la FGE, Wilbert Cetina Arjona, mayor sensibilidad en asuntos de género y más capacitación hacía su personal en temas de igualdad y respeto a los derechos humanos.

Javier Escalante Rosado