Los niños Medina Molina salen del CAIMEDE

Luego de dos meses, los menores ya se encuentran en casa con su madre Ema Gabriela Molina

 

Mérida, Yucatán, 19 de diciembre de 2014.- Los tres niños Medina Molina ya se encuentran en la casa materna, luego que este viernes el Tribunal Superior de Justicia emitió su veredicto a favor de la madre Ema Gabriela Molina Canto, para que tenga la guardia y custodia de ellos.

A dos meses de que los menores Mariana, Isabel y Martín ingresaron al Centro de Atención Integral al Menor Desamparado (CAIMEDE), este mediodía las autoridades decidieron que ya podían estar a lado de su progenitora.

Como hemos informado en Desde el Balcón, durante dos años no se supo del paradero de estos niños, pues su padre Martín Alberto Medina Sonda, se los llevó con rumbo desconocido. Fue hasta octubre pasado cuando dicho sujeto fue detenido por elementos de la PGR en Quintana Roo, y los infantes fueron traídos a la capital yucateca.

Mientras Medina Sonda está recluido en un penal de Tabasco, en donde se le acusa de lavado de dinero, los niños permanecían en el CAIMEDE, en donde eran visitados todos los días por su madre Ema Gabriela Molina.

Este caso llamó la atención a nivel nacional, debido a las influencias que utilizó Medina Sonda para que se les fabriquen delitos a su esposa Ema Gabriela, y a su suegra Ligia Canto Lugo -quienes incluso estuvieron presas en cárceles de otros estados- para que detengan la búsqueda de los menores y sus constantes protestas.

De hecho, los niños resultaron afectados psicológicamente ante toda esta situación, por lo que durante estas semanas –en el CAIMEDE- recibieron atención profesional para tratar los problemas de alienación parental que padecen.

Este viernes, los magistrados sentenciaron que la guardia y custodia de los tres menores sea para Molina Canto, y no al padre, quien enfrenta un proceso penal.

Se informó que los abuelos paternos, quienes también visitaban a los niños durante los días que estuvieron en ese Centro, afectaban el avance de sus tratamientos psicológicos.

Uno de los requisitos para que los niños se quedaran con su madre, es que ella tuviera una vivienda adecuada en donde pudieran quedarse, por tal razón, con apoyo de asociaciones civiles, rentaron una casa y la amueblaron, para que los infantes estuvieran cómodos. (Herbeth Escalante)