Dos financieras establecidas en Dzilam González ejercen fuerte presión hacia sus deudores, a grado tal, de exhibirlos públicamente para que paguen. Para ello, hacen publicaciones en sus cuentas de redes sociales o fijan carteles y mensajes en sitios públicos, como ocurre con una mujer de nombre Keilly Marisol L. A. a quien le han llegado estos avisos públicos hasta la propia puerta de su casa.