Cada vez son más las yucatecas que recurren a la inseminación in vitro.
Mérida, Yucatán, 19 de junio de 2022.- El Instituto Vida reportó que, en el Estado, desde hace 10 años prevalece una tendencia al alza en buscar un “padre por catálogo”, pues el 10 por ciento de las mujeres que acuden al médico especialista tienen la esperanza de ser canalizadas al banco de esperma.
Lo anterior a pesar de que es una opción bastante costosa, pues un padre de catálogo puede costar hasta 8 mil pesos, si es de origen nacional, o 15 mil si es extranjero; además, hay que tomar en cuenta el seguimiento y tratamiento in vitro, cuyo costo total -todo el proceso- puede llegar a costar 100 mil pesos.
Este proceso es llevado con mucho rigor por tratarse de carácter especial y ético, tanto para la mujer que sigue el trámite para quedar embarazada como de quien aportó el semen, que generalmente es de otra entidad.
Es más, hay casos de mujeres que compran por catálogo en el extranjero y el semen llega al Instituto Vida, para proceder con la inseminación.
El doctor Álvaro Pérez May, director Médico del Instituto Vida de Mérida, dijo que la ley mexicana tiene ciertos niveles de control cuando se trata de inseminación in vitro, por ejemplo, las mujeres que buscan un padre para sus hijos lo hacen en catálogo, pero sin la figura o retrato reciente, sino que sólo se presenta a través de un código numérico.
Ese código contiene datos específicos del donante, sin mencionar su nombre o apellidos, pero sí el peso, talla, edad, profesión, color de ojos, cabello, estructura ósea y antecedentes de familia.
Aunque en Mérida nunca se ha dado el caso, en otras partes del país los hijos preguntan quién es su padre y sólo mediante un proceso judicial, siendo ellos ya grandes, el Instituto puede revelar el nombre de quien aportó el semen.
La tendencia más reciente es de homoparentales, es decir, de mujeres que al formar una pareja quieren tener un hijo y buscan este proceso. Hasta ahora es del 1%, lo que representa una cantidad mínima; sin embargo, este fenómeno va creciendo, porque la ley ya permite el matrimonio igualitario.
(Agencias/Desde el Balcón)