Sin multas ni cárcel, INAH propone rescate de casonas

El coordinador nacional de Monumentos Históricos del INAH, Arturo Balandrano, señaló que incentivarían a los dueños de estos predios para que les den mantenimiento.

Mérida, Yucatán, 31 de julio de 2014.-  El coordinador nacional de Monumentos Históricos del INAH, Arturo Balandrano Campo, encabezó un recorrido por diferentes casonas del Centro Histórico que se encuentran en peligro de derrumbe, y señaló que están planeando un proyecto para que –en colaboración con los dueños de estos predios- se puedan rescatar estos inmuebles.

Indicó que la ley federal sobre Monumentos y Zonas Históricas obliga a los propietarios de este tipo de edificios a invertir en su mantenimiento y conservación, sin embargo, dijo que están analizando echar andar políticas públicas para apoyarlos en esta tarea de restauración.

“Si los dueños de estos monumentos no lo hacen, hay sanciones elevadas para ellos, pues el daño patrimonial es un delito, y las penas pueden ser de 3 a 10 años de prisión; pero en el INAH no nos interesa  meter a nadie en la cárcel o cobrar multas, más bien queremos aliarnos con los propietarios y las autoridades para proteger estos patrimonios históricos y que no vuelva a ocurrir otro derrumbe”, señaló el funcionario federal.

Dijo que en todos los Centros Históricos del país se vive la misma situación con este tipo de inmuebles, por lo que presentarían un programa para apoyar a los dueños en sus inversiones de mantenimiento, no sólo para garantizarles seguridad, sino también para que estos edificios sean rentables para ellos.

“Tenemos que trabajar en equipo, armar una política pública entre el ayuntamiento, el gobierno del estado y los propietarios para solucionar el problema; no buscaremos generar castigos, más bien incentivos para conservar estas maravillosas casas que identifican a Mérida como una de las ciudades más bellas del continente”, agregó Balandrano Campo.

Señaló que en breve se reunirá con otras autoridades federales para detallar un programa que tenga como objetivo conservar el patrimonio del país, mantener la seguridad de los habitantes, y darle valor a estos inmuebles para que sean rentables para sus dueños.

Dijo que el INAH está dispuesto a asesorar a los propietarios de las 500 casonas que están en peligro de derrumbe en el Centro de Mérida, en cuanto al mantenimiento  “y no ocurran desgracias, además, para que sus inversiones sean redituables”

Una de los temas que mencionó el coordinador nacional, es que el tapiado con madera que se ha hecho alrededor de estos predios, es una medida incorrecta y no elimina ni disminuye el riesgo de derrumbe. La medida correcta para el INAH es el apuntalamiento (colocar puntales) en la estructura de los edificios. (Herbeth Escalante)