Subastan obras de Frida Kahlo en Nueva York

Las dos pinturas alcanzaron la cifra de 9 millones de dólares

Ciudad de México, 21 de noviembre de 2019.- Dos importantes obras de Frida Kahlo facturaron casi 9 millones de dólares en la subasta de arte latinoamericano de Christie’s.

“Retrato de una mujer de blanco” fue adquirida el miércoles por la noche en Nueva York por 5.8 millones de dólares, mientras que “Canasta con flores” se vendió en 3,1 millones. Ambas habían sido valoradas por la casa en entre 3 y 5 millones de dólares.

El primer cuadro, parte de la Colección de la Doctora Helga Prignitz-Poda, es un óleo sobre lienzo de unos 118 por 81 centímetros (46 ½ por 32 pulgadas) pintado alrededor de 1929. Kahlo se lo obsequió originalmente a la fotógrafa mexicana Lola Álvarez Bravo y desde entonces se ha mantenido en manos privadas.

“Frida Kahlo empezó a interesarse en el arte a mediados de los años 20 y como pintora empezó haciendo retratos de gente cercana a ella”, además de autorretratos, dijo Virgilio Garza, director del departamento de arte latinoamericano de Christie’s, a The Associated Press. “Debido a que este cuadro tiene un tamaño significativo, sabemos que es de alguien que le importaba; lo que no sabemos realmente es la identidad de la modelo”.

La indumentaria del personaje indica que no se trata de una mujer mexicana, pues Frida solía enfatizar la mexicanidad con blusas de encaje, collares y otros elementos, indicó Garza. Agregó que el vestido blanco sugiere que podría tratarse de un retrato nupcial, y que el estilo del peinado y el vestido era muy evocativo de ese periodo.

Por años se asumió que la modelo del retrato era Dorothy Brown Fox, una aspirante a profesora de español que luego escribió radionovelas. Fox llegó de Los Ángeles a la Ciudad de México a fines de los años 20 con la intención de perfeccionar el idioma y poco después conoció a Kahlo.

La familia de Brown Fox ha apoyado esta teoría con cartas estampadas con besos que ambas intercambiaron, y que ahora forman parte del archivo del Museo Frida Kahlo. Pero una investigación reciente del historiador Luis Martín Lozano sugiere que el retrato es de hecho de una inmigrante rusa llamada Elena Boder, que huyó de la Revolución Bolchevique a México con su familia en 1919.

Boder y Kahlo se conocieron en la Escuela Nacional Preparatoria y ambas pensaban estudiar medicina. Siguieron caminos académicos similares hasta 1925, cuando Kahlo sufrió su funesto accidente de autobús y se vio obligada a interrumpir sus estudios. Boder con el tiempo se mudó a Estados Unidos y llegó a ser una neurocirujana conocida por desarrollar una prueba para detectar dislexia en niños pequeños.

Lozano descubrió una foto suya de 1925 y notó su gran parecido con la mujer del vestido blanco en el retrato. Además, pocos años antes de su muerte en 1954, Kahlo le dedicó un bodegón _ “Para Elena Boder, pintado con todo mi amor. Frida Kahlo” _ en una potencial pista de la identidad de su modelo.

Agencias