TIRO AL BLANCO

Un nuevo tipo y forma de gobierno se está visualizando desde la llegada de Andrés Manuel López Obrador y su partido, Morena, y esto ha representado recortes importantes tanto a nivel preuspuestal como en la estructura y operación de todas las oficinas y dependencias de la Federación.

Sin embargo, algo que pareciera inesperado y grave es que por esos recortes presupuestales, el Instituto Nacional Electoral (INE) en Yucatán se vería obligado a aplazar el inicio del próximo proceso electoral y a suspender un proyecto de modernización en diferentes áreas del organismo y en los módulos donde se tramita la credencial de elector.

Fue el vocal ejecutivo de la junta local del INE, Fernando Balmes Pérez, quien reveló esta disyuntiva sobre  el arranque del proceso para las votaciones del año 2021 y que sería a finales de noviembre y principios de diciembre, esto con el objetivo de generar ahorros que permitan al instituto seguir operando.

Precisó que estas estrategias las permite la ley y una de ellas sería reducir gastos de operación y ahorrar en el pago de los consejeros electorales, que son actividades propias del proceso electoral del 2021.

Cabe señalar que el presupuesto del INE para el 2020 será de 11 mil 400 millones de pesos, mil 72 millones de pesos menos de lo que había solicitado y en el caso de Yucatán se desconoce cuál será el monto asignado.

Delicado, grave y preocupante sería que por los nuevos esquemas y recortes económicos, los procesos para elegir autoridades se aplacen, pospongan o deterioren, cuando que a México y Yucatán les costó años y cambios importantes llegar a los niveles democráticos actuales. A ver qué pasa.

Desde el Balcón