UNAM investiga especies de camarones en cenotes

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Son vitales para la conservación de los ecosistemas

Mérida, Yucatán, 22 de octubre de 2020.- Investigaciones sobre especies de camarones que habitan en cenotes de Yucatán revelan que es fundamental la conservación de estos ecosistemas, los cuales se deben mantenerse libres de contaminación para que permanezcan saludables.

Un grupo de científicos de la Unidad MuItidisciplinaria de Docencia e Investigación (UMDI), de la Facultad de Ciencias (FC) de la UNAM, investigan los camarones de cueva y descubrieron que se distribuyen y alimentan de diferentes fuentes.

El líder del proyecto, Efraín Chávez Solís, estudiante de doctorado en Ciencias Biológicas, y sus colegas, analizaron a los pequeños crustáceos que viven en los cenotes de Yucatán y Quintana Roo, los cuales contribuyen a mantener viable y saludable el agua en estos ecosistemas.

En Sisal, explicó Chávez Solís, se encontraron que las tres especies que estudiaron, del género Typhlatya, se distribuyen de diferente manera en el cenote y la cueva.

“Una está en el cenote, donde hay influencia solar; otra está en la caverna, sitio de transición entre el cenote y la cueva; mientras que una tercera está cueva adentro. Las especies cercanas al cenote son de agua dulce y la que está cueva adentro está en el agua salada”, añadió.

El investigador explicó que esto es posible porque los sistemas están estratificados verticalmente, por ello, “cuando cae el agua de lluvia se filtra por la roca y se asienta sobre una capa de agua salada que está abajo y entra desde la costa”.

“Los camarones realizan un proceso de quimiosíntesis para alimentarse y, mientras que las especies que están en el cenote y la caverna se alimentan de algas fotosintéticas, la segunda y la tercera que viven en la cueva de agua salada se nutren de bacterias quimiosintéticas”, abundó el biólogo.

Comentó que en junio de este año, junto con sus colegas, publicaron en la revista Scientific Reports cómo estos camarones se distribuyen y se alimentan de diferentes fuentes dentro de cuevas o cercanías de cenotes en Yucatán.

Jorge Euán