Mérida, Yucatán, 18 de octubre de 2020.– Pues después de haber sido cercanos colaboradores de la llamada 4 T, de unir fuerzas para postularse por Morena en Yucatán en el 2018, uno como candidato a gobernador y la otra al Senado de la República, el coordinador de Programas de Desarrollo Social del gobierno Federal, Joaquín Díaz Mena y la ex candidata de ese partido a Senadora de la República, Mariana Cruz Pool, acabaron distanciados, divididos, peleados o friccionados, y tan así, que ella ahora logró un nombramiento directo del presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, como delegada en la entidad de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).
Mariana Cruz Pool, era desde los tiempos en que ambos (Joaquín y ella) eran panistas, amigos e incondicionales, situación que terminó por romperse estando dentro de la misma estructura del partido Morena y del gobierno de la República que encabeza el político tabasqueño.
La nueva delegada de la SRE era una de las sub coordinadoras de la Secretaría de Bienestar y no acabó en buenos términos con Díaz Mena, por lo que decidió renunciar. Enterado del conflicto, el mismo López Obrador, fiel a su estilo, invitó a la ex panista motuleña a sumarse a su gobierno independientemente de lo que hace Díaz Mena.
Es así, como ahora la mujer tendrá la oportunidad de buscar su crecimiento político ajeno a Díaz Mena, con la gente y grupo político del titular de la SRE, Marcelo Ebrard, el hombre que hasta ahora -a dos años de distancia del actual régimen López-Obradrista, ser el más cercano y favorecido por el mismísimo primer mandatario del país.
Seguramente la ahora funcionaria federal, tendrá medios para moverse de manera autónoma en Yucatán, al menos políticamente hablando. A ver qué pasa.
Desde el Balcón