Pobladores y ganaderos se preparan ante una eventual inundación en la región / Sin problemas de salud hasta ahora
Campeche, 12 de agosto de 2016.- Habitantes de comunidades y colonias cercanas al río Candelaria se mantienen a la expectativa por la llegada de los últimos escurrimientos ocasionados por lluvias en las zonas altas del país vecino Guatemala.
Hasta este jueves el afluente mantiene un crecimiento de 5.40 metros sobre el nivel del mar, mientras los pobladores esperan un leve aumento en los próximos días y que no afecte a las casas ubicadas en un margen de 10 metros de la orilla.
La colonia San Isidro y Venustiano Carranza están cercanas a los arroyos que se desprenden del río Candelaria, en la cabecera municipal, entre las dos hay al menos 300 familias que corren el riesgo de ser afectadas por el crecimiento constante del afluente principal del municipio y que hasta el momento no ha alcanzado la medida de alerta para empezar a llenar sacos de arena y colocarlos para crear un bordo que impida su desbordamiento.
En San Isidro, doña Carmela López Palma relató que desde hace 40 años habita junto con su familia uno de los solares que conforma la colonia y desde entonces 5 veces han sufrido la furia de la naturaleza cuando el río se desborda y el agua invade los patios e incluso entra a las casas, dañando las pertenencias y destruyendo parte de las viviendas de madera, que es la que habitan la mayoría.
Señaló que poco a poco los habitantes han logrado volver a levantar sus casas, así como rellenar con material para hacer las bases más altas, pues la indiferencia de los presidentes municipales, funcionarios estatales y federales, se ha notado a lo largo de los años que han estado habitando la zona.
En el caso pronto, el ex edil Candelario Salomón Cruz no hizo algo por mejorar las condiciones de vida de la colonia y mucho menos de las demás que se encuentran en la ribera de los ríos.
Hasta el momento con Salvador Farías González no se ha presentado ninguna contingencia que ponga en estado de alarma a las de 200 familias. Sin embargo, afirmó que las brigadas de Protección Civil acudieron durante el paso de la tormenta tropical “Earl” la semana pasada, a causa de un incremento gradual en la medida de hondura del río.
López Palma dijo que los pobladores se han mantenido en alerta por las experiencias que han vivido con pasados huracanes y tormentas, pese a que a los escurrimientos no se han presentado de manera continua ni fuerte, “lo que sí sabemos todos es que no podemos esperar a que vengan los funcionarios y nos ayuden porque jamás lo han hecho, nos prometen laminas y algunas tablas para reconstruir las casas pero jamás llegan, por ello nos ponemos a trabajar más fuerte para recuperar nuestras cosas con nuestras propias manos”.
Conocido como la Palapa de Gonzalo, la belleza del lugar que lo rodea es innegable, tanto como la peligrosidad a la que se ve sometido por el caudal que se observa, incluso a los lados se pudo apreciar cómo está bordeado con lagunas que al mantenerse las lluvias, de igual manera aumenta el nivel, convirtiéndose en un problema para los dueños del lugar, poniendo en riesgo su capital y su integridad de encontrarse ahí cuando los escurrimientos bajen de golpe.
Por otro lado, las comunidades como Miguel Hidalgo, Las Golondrinas, El Ramonal, Estrella del Sur, Narciso Mendoza, Flor de Chiapas, El Desengaño y Nueva Delicias, pese a que durante el paso de “Earl” no hubo alertas de gravedad, se mantienen a la espera de los escurrimientos, pues los arroyos son el mal directo de las mismas; en dichas comunidades se suman al menos 400 familias con posible daño en caso de presentarse de manera constante las bajadas de agua a los arroyos y lagunas cercanas. (Con información de Por Esto!)