Aún sin fecha ni recursos para la cámara hiperbárica

Dicen que harían falta 60 millones de pesos para este proyecto, pero no se sabe si la federación etiquetará recursos para dicha obra en 2015.

Mérida, Yucatán, 29 de diciembre del 2014.- El proyecto de la cámara hiperbárica, que se anunció en la administración pasada como parte de las obras del Hospital O´Horán, aún no cuenta con los recursos para que concluya, y el propio secretario de Salud, Jorge Eduardo Mendoza Mezquita, señaló que no se sabe si la federación destinará dinero para que se concrete en el 2015.

“En este año (el 2014) no llegó el recurso, esperemos que la federación lo libere, y venga etiquetado el próximo año para la finalización de la Unidad de Choque y Trauma, que contempla la cámara hiperbárica y otras áreas”, señaló en entrevista.

Como se recordará, la ex gobernadora Ivonne Ortega Pacheco anunció durante su gestión que Yucatán contaría con esta tecnología, pero la obra no se concluyó. De hecho, se supo que el grupo financiero Banorte donó 11 millones de pesos para dicho objetivo.

Sin embargo, hasta el momento no se le ha dado seguimiento al proyecto, pues supuestamente el gobierno federal debe destinar recursos específicos para que el hospital O´Horán cuente con la cámara hiperbárica.

Mendoza Mezquita declaró que harían falta 60 millones de pesos para esta obra, inversión que se aplicaría principalmente para adquirir el equipo médico, ya que supuestamente para la obra civil –de la torre de hospitalización- “sólo falta el 5 por ciento”.

El secretario de Salud declaró que “le encantaría” que en 2015 aterricen esos recursos para poder contar con la cámara hiperbárica, pero recordó que también están pendientes otros proyectos, como la siguientes fases del hospital de segundo nivel de Valladolid.

El funcionario agregó que “seguirán pugnando” ante la federación para que lleguen los recursos para dicha área en el O´Horán,  y por fin se etiquete el dinero específico.

Con la cámara hiperbárica no sólo se atenderían a los pescadores que sufren descompresión, sino también a pacientes con problemas circulatorios, diabéticos, o vinculados a infartos cerebrales, entre otros. (Herbeth Escalante)