Al parecer, las denuncias que se han impuesto no han procedido.
Hopelchén, Camp. 12 de noviembre de 2016.- Menonitas del campo Las Flores sembraron, en días anteriores, cultivos genéticamente modificados en seis parcelas, con una superficie total de mil hectáreas, también construyeron pozos de absorción en las inmediaciones de dichos cultivos, lo que ha ocasionado que contaminen el manto freático con agroquimicos, principalmente glifosato.
Luis Arturo Carrillo Sánchez, investigador y coordinador de Comunicación Social del Colectivo MA OGM, constató el sembradío de soya en proceso de secado en una de esas seis parcelas.
Con los pozos de absorción perforados cerca de las parcelas pretenden evitar inundaciones en los cultivos. Les tienen bien planeados sus desniveles, y los agroquímicos de la soya se lavan y se van directo al manto freático, contaminándolos severamente, sobre todo con glifosato.
Esos pozos están prohibidos. La Conagua señala que no tiene información porque no ha expedido ninguna autorización. Por tanto esos pozos se perforaron de manera ilegal.
Greenpeace e Indignación denunciaron en 2015 este hecho ante Profepa. Se han agotado todos los recursos legales para denunciar esos pozos, y aún no se tiene respuesta.