Tenemos una caída del 32%: CMIC
Mérida, Yucatán; 15 de agosto de 2020.- A cinco meses de la declaración de la emergencia sanitaria en la entidad, el sector de la construcción ha sido de los más castigados con una caída del 32%, aseveró Raúl Aguilar Baqueiro, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Construcción (CMIC) en Yucatán.
Explicó que de las cerca de 15 mil viviendas programadas por el gobierno federal únicamente se lograrán unas 10 mil.
La falta de obra pública, aunado a la incertidumbre en el sector inmobiliario, ha provocado una desaceleración en obras y proyectos confirmados para este año, indicó el dirigente empresarial.
Recordó que el gobierno estatal había anunciado la realización de obras de infraestructura en el estado por un monto superior a los 3 mil millones de pesos que no se cumplirá.
De igual manera, dijo que el Ayuntamiento de Mérida tenía presupuestados trabajos por 464 millones de pesos, sin embargo, la situación actual ha obligado a reajustar la inversión pública.
Aguilar Baqueiro señaló que en 2019 se programaron 2 mil 229 millones de pesos para obras de infraestructura, de los cuales el 93.16% se hizo con contratos a través de licitaciones públicas. Esos proyectos fueron desarrollados por 204 empresas, de las cuales 193 fueron yucatecas y 181 están afiliadas a la CMIC.
Sobre el mismo tema, Eduardo Ancona Cámara, presidente de la Cámara Nacional de Vivienda (Canadevi) en la entidad, consideró que 2020 será un año «muy complicado» y la construcción de vivienda en el estado se reducirá hasta en un 30%.
Explicó que de las cerca de 15 mil viviendas programadas por el gobierno federal únicamente se lograrán unas 10 mil.
«A eso hay que sumarle la paralización en el sector inmobiliario que ha frenado inversiones privadas significativas en este mismo sector, propiciando una presión sobre la generación de vivienda social y privada en el estado», explicó.
Ancona Cámara dijo que, hasta antes de la emergencia sanitaria, Yucatán se encontraba entre los tres estados con mayor crecimiento inmobiliario con un 3.2% en 2018, situación que aumentó el año pasado, sin embargo, las condiciones actuales indican un retroceso en este rubro ya que se dejarán de construir unas 2 mil viviendas para el sector privado.
Expuso que, al ser consideradas dentro de la primera ola de la reactivación económica, la industria de la construcción reinició actividades el pasado 8 de junio y hasta el momento no se han registrado casos de contagio entre alarifes y personal de obra, por lo que esperan retomar el paso para poder reportar cuando menos un mínimo crecimiento al cierre de año.
ACOM