Luego del cese de funcionario de la FGE, investigadora afirma que la violencia contra las mujeres no se detiene por decreto.
Mérida, Yucatán, a 20 de agosto de 2019.- La académica del Centro de Investigaciones Regionales (CIR) de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY), Gina Villagómez Valdez, afirmó que el despido del trabajador de la Fiscalía General del Estado (FGE) por sus comentarios misóginos en redes sociales fue una decisión congruente y una sanción ejemplar “porque hoy en el Estado este tipo de acciones, es un delito tipificado como violencia digital”.
Cabe recordar que Desde el Balcón publicó que Fausto Enrique Loría Ortiz, servidor público de la FGE, publicó en redes sociales comentarios en contra de las mujeres que protestaron por la violencia de género en la Ciudad de México el pasado viernes, señalando que deberían rociarles gasolina y prenderles fuego.
A raíz de esta publicación, el domingo en su cuenta de Twitter, el gobernador del Estado, Mauricio Vila Dosal, anunció el cese del funcionario.
Al respecto, Villagómez Valdez señaló que las protestas de mujeres el pasado fin de semana surgieron a raíz de tres presuntos casos de abusos policiacos. “Sin embargo, esto solo es la punta del iceberg, porque el incremento de la violencia de género en este año es el detonante de un problema cuyos responsables son las autoridades de los tres niveles de Gobierno”.
“Se tiene que reeducar a las nuevas generaciones; la violencia en contra de las mujeres no se detiene por decreto. Por ello, el gran responsable de las políticas de género es el Gobierno en todos sus niveles”, puntualizó.
Respecto a la decisión del gobernador Vila Dosal, afirmó que el gobernador hizo “lo politicamente correcto porque el cesado se trata de un servidor público de la Fiscalía, dependencia que debe garantizar los derechos y la impartición de justicia, obligación que se encuentra establecido en la Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia”.
Recordó que en junio pasado, el Congreso del Estado aprobó por unanimidad las modificaciones a la Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, en el que se define y sanciona la violencia digital.
“La violencia digital es cualquier acto realizado a través del uso de la tecnología de la información y comunicación, medio digital, redes sociales, u otra tecnología de transmisión de datos, que atente en contra de la dignidad humana, imagen, integridad, intimidad, libertad, honor, seguridad u otro derecho tanto a las mujeres como a su familia”, puntualizó la investigadora.
Finalmente, manifestó que la gran deuda de México con las mujeres es el sistema educativo, lo que se puede observar en los libros de texto los cuales no incluyen mensajes democráticos ni en contra de la discriminación hacia grupos vulnerables, «sobre todo en una sociedad donde prevalece la homofobia y xenofobia”.
Jorge Euán