Especialistas advierten sobre una hambruna en Centroamérica

Afirman que el clima está afectando severamente los cultivos en la región.

CIUDAD DE MÉXICO, 20 de septiembre de 2014.– Hay una mala noticia: los malos pronósticos del clima amenazan con una hambruna de “proporciones épicas” que podría alcanzar a dos millones de personas de Centroamérica y el Caribe. Pero también hay una buena noticia: la caída histórica de los precios del maíz, que es la base de la alimentación en dicha región.

“Un grupo de salvadoreños, centroamericanos y de otros países están viniendo a Estados Unidos, no creo que les vaya a ir mal, porque tienen la oportunidad de comprar muy barato”, dijo a este diario Caridad García Manns, quien ha asesorado a las máximas autoridades agrícolas de China, de Suecia, de Vietnam y de Latinoamérica.

Porque las advertencias de hambrunas en la región llegaron justo cuando Estados Unidos tuvo una cosecha récord de 720 millones de toneladas métricas de maíz que tiró el precio del bushel de la gramínea a niveles que ni siquiera cubren los costos de producción: 2.50 dólares por bushel, tal y como anticipó desde agosto Samuel R. Allen, el presidente de la fábrica de tractores John Deere.

Aun así el Programa Mundial de Alimentos de Naciones Unidas advirtió de los riesgos de hambruna derivados del fenómeno climatológico de El Niño en Centroamérica que se suman las magras cosechas de 2014/2015 y las pérdidas que ha causado la roya del café
—la peor enfermedad del aromático— en las zonas montañosas de El Salvador.

Latin American Advisor, una publicación del InterAmerican Dialogue de Washington, recogió las advertencias de Donald J. Planty, exembajador estadunidense en Guatemala, Erick Baranick, representante de la Cruz Roja estadunidense en Centroamérica, George Redman, director de Oxfam Honduras, Bruce Isaacson, directivo de Famine Early Warning Systems Network; James M. Mayer, de Harper Meyer de Miami.

Baranick, de la Cruz Roja, recomendó que las ONG de Centroamérica refuercen la organización de los líderes comunitarios e identifiquen las prioridades para reducir el impacto de una posible escasez de alimentos agudizada por la intensa sequía.

“La grave sequía de Guatemala, Honduras y El Salvador ya destruyó cosechas y ganado de subsistencia de los agricultores de toda la región”, dijo Meyer, quien recomendó recurrir de urgencia a la comunidad internacional para evitar “un desastre humanitario de proporciones épicas”.

Redman dijo que ya se declaró el “estado de emergencia en Honduras” donde ya se distribuyeron raciones alimenticias a 80 mil familias, mientras Isaacson advirtió que unos dos millones de guatemaltecos, nicaragüenses, hondureños y salvadoreños requieren ayuda para evitar una crisis alimentaria derivada la peor sequía de los últimos diez años y el acelerado aumento de 100 a 144 por ciento de los precios de insumos básicos como el frijol rojo.