Exoneración de policía intensifica crisis racial en NY

Ayer se volvieron a manifestar cientos de personas para reprochar la decisión de un jurado que libró de cargos al agente blanco que mató a un hombre negro.

NUEVA YORK, 5 de diciembre de 2014.— Más de mil 500 personas se manifestaron ayer en Nueva York para denunciar la impunidad policial, tras la exoneración de un oficial blanco acusado de matar a un hombre negro, en un nuevo caso que reavivó las tensiones raciales en Estados Unidos.

Mientras que en Nueva York se intensifica el debate sobre los abusos policiales, en Cleveland, donde un niño también negro fue abatido por un agente recientemente, los uniformados fueron hallados responsables de uso “excesivo” de la fuerza.

Los dos casos se enmarcan en las fuertes tensiones raciales que se registran en Estados Unidos, en particular por los sucesos de Ferguson (Misuri), donde el joven negro, Michael Brown, murió en agosto pasado a manos de un oficial que no fue procesado por un jurado diez días atrás.

En Nueva York, la decisión el miércoles de exonerar al policía Daniel Pantaleo por la muerte de Eric Garner, de 34 años y muerto durante un violento operativo policial el 17 de julio en

Staten Island, provocó protestas que dejaron tan sólo ese día 83 detenidos, a pesar del llamado a la calma del alcalde, Bill de Blasio.

Numerosas personas salieron a manifestarse, la mayoría de manera pacífica, en la zona de Times Square y el Rockefeller Center y en los barrios de Harlem y Staten Island, tal como había ocurrido en Ferguson, aunque en la ciudad de Misuri las protestas habían degenerado en saqueos y violencia.

Con una nueva movilización a la sede del Departamento de Policía anunciada para esta jornada, De Blasio reafirmó ayer el derecho a manifestarse, pero señaló que “la violencia y el desorden” son “erróneos” y “contraproductivos”.

«La frustración es comprensible. Tenemos siglos de racismo detrás nuestro. Pero trabajando juntos, podemos alejarnos de esa historia y hacer un cambio profundo y duradero en la cultura de la policía y acercarla a la comunidad”, dijo en una carta abierta a los neoyorquinos.

Los manifestantes agitaban ayer pancartas que decían “La vida de los negros cuenta” y “El racismo mata”, y gritaban “¡No puedo respirar!”, en referencia a lo que dijo Eric Garner, de 43 años, cuando fue tomado por el cuello por el policía Daniel Pantaleo en un violento operativo policial el 17 de julio pasado que fue filmado por un aficionado.

«Ferguson está en todas partes”, rezaban muchos carteles, en referencia a la ciudad de Misuri donde un jurado decidió hace diez días no procesar a otro policía blanco, Darren Wilson, que mató a Brown.

Un video que no bastó

El alcalde, que asumió en enero pasado con la promesa de mejorar el trato de los negros y los latinos, aseguró que la ciudad “ha comenzado a hacer progresos”, por ejemplo “reduciendo de manera drástica el uso excesivo y abuso” de la práctica policial de controles espontáneos en las calles.

Ayer, anunció que la policía sería entrenada para mejorar su interacción con la comunidad.

Padre de tres hijos, sospechoso de vender cigarros ilegalmente, Eric Garner fue sometido por la fuerza tras intentar resistirse al arresto por varios oficiales blancos, uno de los cuales lo tomó por el cuello, una práctica prohibida en Nueva York.

La actuación de Pantaleo fue captada por la cámara de un aficionado. En el video, Garner se queja en varias ocasiones de no poder respirar. Obeso y asmático, perdió luego el conocimiento y fue declarado muerto en el hospital. Su deceso fue calificado como homicidio por la oficina forense.

«Estamos viendo demasiadas instancias en las que la gente no tiene confianza en ser tratada de manera justa”, reaccionó rápidamente el presidente, Barack Obama, tras la decisión del gran jurado.

El secretario de justicia estadunidense, Eric Holder, anunció la apertura de una investigación federal por una posible violación de los derechos de Garner, cuya madre no ocultó su malestar tras la decisión del gran jurado.

«¿Cómo vamos a confiar en nuestro sistema judicial cuando nos decepcionan en este momento?”, lamentó Gwenn Carr.

El jurado, compuesto por 23 estadunidenses, “halló que no había causa razonable para votar un procesamiento”.

MAYORÍA DE TESTIGOS ERA DE AGENTES

El juez Stephen Rooney, de la Corte Suprema del estado de Nueva York, reveló ayer que de los 50 testigos que fueron escuchados por el gran jurado que decidió no imputar a un policía que mató a un hombre desarmado, la mayoría eran agentes policiales y personal médico.

Según Rooney, había 22 testigos civiles. El magistrado indicó además que se admitieron cuatro videos como evidencia, entre la que se incluyó registros de los procedimientos y entrenamientos policiales, historiales médicos y fotografías del lugar del hecho.

Un gran jurado decidió el miércoles no imputar al policía que mató a un hombre negro desarmado al asfixiarlo cuando intentaba someterlo y lo tomó por el cuello. La decisión derivó en una nueva ola de protestas en Nueva York que reprochan los abusos policiales.

«Estamos orgullosos de cómo respetamos las protestas”, manifestó el alcalde de Nueva York, Bill de Blasio. “No toleraremos la violencia o el desorden”.

«En particular reconozco el mérito (del Departamento de Policía de Nueva York) por haber manejado la situación de manera apropiada”, señaló.
(Reuters y DPA)