Guerreros entregan pase olímpico a Argentina

Múltiples fallas frente al aro y sin poder mantener una considerable ventaja, el Tri de baloncesto va a repechaje tras caer 78-70.

CIUDAD DE MÉXICO, 12 de septiembre de 2015.- Cuando Jorge Gutiérrez cometió su quinta falta se murió el sueño olímpico para México. La selección de basquetbol cayó peleando en la duela, pero al final los argentinos dieron un golpe de autoridad y derrotaron 78-70 a una quinteta tricolor que se perdió en el último periodo.

México cayó con la misma receta que había ganado hace dos días. Ahora llevó la ventaja prácticamente todo el partido, incluso provocó que Luis Scola repartiera regaños, que Andrés Nocioni se desconcertara y que Facundo Campazzo cometiera una absurda falta sobre Gutiérrez. Eran los momentos prometedores del Tri.

Gutiérrez, Ayón y Héctor Hernández jugaron todo el primer cuarto y en el segundo la defensa dio una cátedra al aguantar más de siete minutos con sólo dos puntos argentinos. Al final del periodo, la albiceleste logró 10, pero la ofensiva tricolor apenas pudo tomar una ventaja de 40-35.

Segundo tiempo parejo, rudo, de riñones y duelos físicos. Cuando faltaban cuatro minutos del tercer periodo entró Orlando Méndez, recibió aplausos porque se presagiaba una opción nacional en medio del desconcierto ofensivo. Orlando, infiltrado y con una venda, no encontró el aro y regresó a la banca resintiendo la dolencia que lo sacó del torneo desde el segundo duelo.

En la conclusión del tercer periodo México tuvo sus momentos más aciagos cuando Argentina igualó a 60. Los albicelestes se fueron adelante y Ayón fue marcado con una eficacia que presagiaba penumbras, porque Gutiérrez salió con el labio sangrando tras caer en la duela.

El último cuarto fue de infarto. Regresó Gutiérrez y su facha de eterna serenidad. Luego una tapa de Ayón a Scola prendió a los 19 mil espectadores. Enseguida una dos puntos, gracias a una colada de Gutiérrez sobre Scola y Nocioni. El partido estaba igualado a 64 y Campazzo cometía su cuarta falta.

Vino entonces el derrumbe. A falta de cinco minutos Héctor Hernández abrió las manos para preguntar que hacía, con el balón en su poder no encontraba un receptor porque Argentina cerraba sus espacios.

Los sudamericanos ganaban 71-66. México había perdido la brújula y dio el balón a Gutiérrez para tirar de tres, una tarea que originalmente estaba mandada para Stoll y Cruz; pero ambos estaban marcados.

Con la pizarra 72-70 Gutiérrez cometió su quinta falta, sobre Scola. Ahí terminó la opción de que estos 12 guerreros pasaran a ser históricos. México intentó, pero sin idea. Su hombre más sereno estaba fuera y las últimas jugadas fueron sólo de ímpetu pero sin efectividad. Se acabó el tiempo, ahora quedan unos meses para ir al repechaje mundial. (Excelsior)