Inicio formal de Matías Almeyda

El técnico argentino fue presentado por Jorge Vergara como el nuevo entrenador del Guadalajara.

CIUDAD DE MÉXICO, 19 de septiembre de 2015.– Matías Almeyda se puso frente a una leyenda. Chivas le abrió las puertas y lo presentó como su nuevo entrenador. Se viven tiempos revueltos en el Guadalajara y el técnico argentino, que no tiene la aprobación unánime de la afición, espera que su etapa sea buena.

«Confío mucho en lo que vamos a hacer, en que esta etapa va a ser muy buena, pienso en positivo pero vamos a necesitar el apoyo de la gente, sobre todo los jugadores.”

Desde que llegó, cuando aún dirigía José Manuel de la Torre, todo ha sido un constante ajetreo y ha experimentado muchas sensaciones entre la felicidad, el miedo y la ambición.

«Nadie de la afición me ha dicho nada. Soy muy respetuoso de la gente, pueden decir lo que sienten. Si alguna vez juzgaron a Jesús ¿cómo no me van a juzgar a mí?”

Almeyda firmó por dos años y su presentación, un tanto improvisada, se retrasó 45 minutos con la hora establecida, sin embargo, lo que le importa al estratega argentino es ganar terreno.

«Ojala pueda transmitir rapidamente a los jugadores el pensamiento que traigo. Quisiera haber jugado en Chivas porque es un grande, uno de los clubes que más gente tiene en el mundo, es un priviliegio estar aquí.”

Sabe de la historia, que el Guadalajara ocupa exclusivamente a elementos mexicanos y que un entrenador extrajenjero duplicará la presión en su contra desde el inicio.

«Creo que es algo muy lindo y al mismo tiempo un reto para un entrenador extranjero. Mi vida siempre ha sido un desafio. Me fui de la casa de mi padre a los 15 años a ganarme la vida con el futbol,  estoy acostumbrado a luchar. Creo mucho en el esfuerzo y el trabajo.”

De jugador se recuerda a un hombre del medio campo incombustible, con una banda en la frente que se empapaba de litros de sudor y que aunque no tenía mucha técnica, jamás rehuía de un mano a mano con el rival para recuperar la pelota. Él, como capitán, descendió con River Plate y luego se hizo entrenador en una etapa tan difícil como la que vive ahora Chivas.

«En River, todos los entrenadores de renombre huyeron cuando se fue a la segunda, así empecé y por suerte salió todo muy bien. Me jugué mi futuro como entrenador. Hoy no vengo a que piensen que seré un salvador sino lo comtrario, vengo a ganar.” (Excelsior)