Una mujer canadiense aparece asesinada, pero el primer sospechoso se queda junto a ella en todo momento
Mérida, Yucatán, 25 de enero de 2020.- Un presunto asesinato se registró este sábado en un predio del centro de la ciudad, donde aparentemente un residente canadiense mató a su esposa (también de esa nacionalidad), a la que habría estrangulado con un cable, y para cerciorarse que estuviera ya muerta la habría asfixiado cubriéndole la cara con una sábana y hasta presuntamente la acuchilló.
Los hechos sucedieron de una manera muy extraña, porque fue el propio extranjero, Jean Paul L., de 76 años, el que le avisó a un vecino sobre la muerte de la mujer, Henrieta M., de 85 años. Además, el canadiense permaneció en la casa cuando llegó la Policía.
La vivienda estaba en orden, sin nada que delatara hechos violentos previos al fallecimiento.
Uno de los vecinos, que vio todo y que prefirió el anonimato explicó que estaba en su pequeño negocio cuando entró su vecino el canadiense vistiendo solo con un sport y le dijo que “murió Henrieta … murió mi esposa”.
Pero el hombre tenía manchas de sangre en varias partes del cuerpo y decidió llamar a la policía. Al llegar los oficiales la encontraron muerta
El canadiense nunca optó por darse a la fuga, tampoco parecía dimensionar que había privado de la vida a su pareja. Incluso cuando fue detenido y esposado se preguntaba que hizo. Al parecer el hombre padece alguna enfermedad mental.
En pocos minutos la zona se lleno de policías, pero se retiraron cuando se dio a conocer que al parecer el hombre que lo había hecho estaba detenido.
El cuerpo de la mujer tenía un cable en el cuello y heridas hechas con un arma punzocortante.
Desde el Balcón.