TIRO AL BLANCO

Las renuncias en «cascada» del ex Secretario de Salud José Narro Robles,
así como de Beatriz Pagés y la renuencia a participar en el proceso interno del ex dirigente nacional del PRI y ex diputado federal Manlio Fabio Beltrones hablan de los momentos altamente complicados que enfrenta el que fuera el partido hegemónico en el poder y la sospecha de que nuevamente en ese partido se pretende «dar línea» a favor del gobernador con licencia de Campeche, Alejandro Moreno Cárdenas, para que finalmente sea el nuevo líder nacional tricolor.

Todo ello, en medio de las sospechas de que «Alito» conduciría a lo que queda del priismo nacional a una especie de «satélite» o aliado del gobierno actual que encabeza Morena y el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, con lo que prácticamente se iniciaría el desmantelamiento priista con miras al futuro electoral.

La única que hasta hoy parece firme en sus intenciones de competir por el PRI nacional es la ex gobernadora de Yucatán, Ivonne Ortega Pacheco, que también ya denunció públicamente la supuesta artimaña política que encabezaría el ex gobernador campechano, a quien a últimas fechas se le ha identificado de sobra a favor y con claras tendencias hacia López Obrador.

Así las cosas, el priismo a todo lo que da en sus peores momentos, incluso mucho más malos que los que enfrentó en el año 2000 cuando por primera vez perdió la Presidencia de la República.

Desde el Balcón