Gobierno de Campeche aplicará austeridad por recorte presupuestal

Durante todo el 2016 se tendrán altibajos en materia presupuestaria, por lo que se ha planificado un programa de austeridad en el que no se afecten los apoyos sociales.

Campeche, 16 de febrero de 2016.– Ante el recorte del presupuesto federal que tuvo Campeche en este año, a consecuencia de la caída del precio del petróleo, el gobierno del estado implementará un programa de austeridad en las diversas dependencias gubernamentales, principalmente en el gasto corriente.

La secretaria de Finanzas del estado, América Azar Pérez, señaló que por la afectación que tuvo la administración pública estatal en sus ingresos provenientes de la federación, se aplicarán medidas austeras en las dependencias, sin impactar a los programas sociales.

La funcionaria estatal explicó que los ajustes se realizarán para aprovechar al máximo cada peso de las dependencias del gobierno, pues la instrucción del gobernador es que se trabaje con austeridad, sin afectar a los que más necesitan del apoyo gubernamental.

Azar Pérez precisó que los ajustes se harán considerando que el estado recibe un recurso federal a inicio de mes, pero para finales del mismo se tiene que esperar el cálculo final de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), el cual indicará si recibiremos más dinero o hay que devolver alguna cantidad a la federación.

La Secretaria de Finanzas del gobierno de Campeche anotó que la Ley de Ingresos son estimaciones que cada estado tiene, pero para este año la Secretaría de Hacienda emitió un comunicado donde informaba lo contemplado para Campeche.

Sin embargo, se tiene que esperar a que termine febrero para saber cuánto es lo que Campeche recibirá de participaciones en el mes de enero, con lo cual se hace la estimación por lo recaudado y se puede tener una cifra de los recursos que se le asignarán.

América Azar anticipó que durante todo el 2016 se tendrán altibajos en materia presupuestaria, por lo que se ha planificado un programa de austeridad en el que no se afecten los apoyos sociales, así como tampoco reducir el salario de los trabajadores al servicio del estado. (El Financiero)