Mujeres mayas abonan a la ciencia

En Yucatán se desarrollan investigaciones de fuerte impacto social y ambiental

Mérida, Yucatán, a 1 de septiembre de 2019.- El Centro de Investigación Científica de Yucatán (CICY) desarrolla cuatro proyectos con un fuerte impacto social y ambiental en Yucatán, en los cuales participan en su mayoría mujeres.

Durante la visita de investigadores del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) se presentó un proyecto de orégano de monte en la comunidad de Nohuayún, en Tetiz, donde se trabaja con productores, en su mayoría mujeres mayas, la cuales han sido beneficiados con la mejora de sus prácticas productivas.

Este progrmaa de investigación está encabezado por Luz María Calvo Irabién, investigadora de la Unidad de Recursos Naturales del CICY, el cual obtuvo el segundo lugar del Premio “Tierra de Mujeres Yves-Rocher 2017”, por su contribución al desarrollo de un sistema productivo de orégano en el campo yucateco.

Asimismo, científicos del Conacyt visitaron las áreas de producción orgánica con cocoteros resistentes al amarillamiento letal que, en conjunto con la empresa MAPSA, se han plantado para reforestación.

“Este trabajo, el cual lleva treinta años de investigación del CICY, ha permitido seleccionar las plantas y mejorarlas”, indicó Carlos Oropeza Salín, de la Unidad de Biotecnología del CICY y líder del proyecto.

En Cuzamá se visitó al grupo de mujeres mayas que estableció una empresa de producción de chile habanero y productos derivados, bajo la asesoría de Nancy Santana Buzzy, de la Unidad de Bioquímica y Biología Molecular de Plantas del CICY.

Finalmente, en la comunidad de Xoy, en Peto, se desarrolla el proyecto Milpa Maya, liderado por Javier Mijangos Cortés, de la Unidad de Recursos Naturales del CICY, donde se presentaron los trabajos que realizan científicos y productores para proteger, conservar y preservar la variedad de maíces criollos, ibes, frijoles y calabazas que se dan en la milpa, así como aumentar las capacidades productivas de la población, y revalorizar la milpa como un eje social, cultural, económico y ambiental.

Jorge Euán