Van a la cárcel por posesión ilegal de pepino de mar

Son acusados de delitos contra la biodiversidad por capturar la especie en veda con fines de comercio.

Mérida, Yuc. 11 de octubre de 2014.- La Procuraduría General de la República (PGR) a través de su Delegación Estatal en Yucatán, obtuvo del Juez de Distrito en el estado, auto de formal prisión contra cinco personas detenidos en distintos hechos por su presunta responsabilidad en la comisión del delito contra la biodiversidad.

En un primer hecho, de acuerdo con la causa penal, dos individuos fueron detenidos por elementos de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado, en el punto de control, ubicado en el tramo carretero Sinanché-Yobaín, del municipio Dzilam de Bravo, cuando circulaban a exceso de velocidad a bordo de una camioneta, en posesión de 203 kilos 550 gramos del producto marino conocido como “pepino de mar”, ocultos en un doble fondo de la unidad.

Los sujetos quedaron a disposición del Ministerio Público de la Federación, y luego de desahogadas las diligencias de ley, el expediente fue consignado ante el juez de la causa, quien dictó auto de formal prisión por el delito referido, en la modalidad de transporte de la especie acuática declarada en veda, concretamente de pepino de mar (Isostichopus Badionotus), con fines de comercio.

En otro caso, según consta en la causa penal, oficiales federales de la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca (Conapesca), detuvieron a tres indiciados en posesión de 173 kilos 250 gramos de pepino de mar, cuando se encontraban en altamar sobre las costas de Dzilam de Bravo, en una embarcación sin matrícula ni nombre.

Luego de integrar las indagatorias con todos los elementos probatorios, el Fiscal Federal ejerció la acción penal correspondiente. Derivado de esto, el Juez de la causa dictó auto de formal prisión, por el delito de contra la biodiversidad, en la modalidad de captura de ejemplares de especie acuática declarada en veda, concretamente de pepino de mar (Isostichopus Badionotus), con fines de comercio.

Los ahora procesados están internados en el Centro de Reinserción Social, con sede en la ciudad de Mérida, donde enfrentarán su proceso  penal.