Adicciones emergentes: ludopatía, videojuegos e internet

Si bien en Yucatán ya existe una Ley contra las Adicciones, ésta solamente previene, no da una atención integral

Mérida, Yucatán, 3 de febrero del 2020.- El Sector Salud y organismos especializados, como el Centro de Integración Juvenil (CIJ), coinciden en que cada año en Yucatán aumenta el consumo de drogas ilícitas y las permitidas, sin embargo, surge una llamada de alerta ante la aparición de otras adicciones relacionadas con la ludopatía, videojuegos y el uso indiscriminado del internet y del celular, así como al sexo, las compras y el trabajo.

Resultados de la última Encuesta Nacional de Adicciones 2018 revelan, por ejemplo, que en Yucatán hay 9 mil ludópatas, de los cuales solo el 0.5 por ciento ha buscado ayuda profesional para tratar su adicción y el 99.5 por ciento de los jugadores restantes no cuentan con programas públicos especializados en este tema o un sistema de atención integral.

“El concepto de la adicción puede asociarse a conductas o comportamientos saludables, no peligrosos, incluso placenteros. Estas conductas pueden convertirse en adictivas en función de la fuerza, la asiduidad o la cantidad de tiempo y dinero que invierte una persona para llevarlas a cabo llegando a interferir gravemente en su funcionamiento. Nos referimos por ejemplo a la utilización de internet, el sexo, el trabajo, realizar compras, la comida, el juego, entre otros”, explicó Juan Canto, especialista en Psicología, Sexología y presidente de la Asociación Mexicana para la Igualdad y el Bienestar “Yaxche”.

Señaló que la dificultad de enfrentar los problemas, una baja autoestima, la intolerancia a estímulos físicos o psicológicos desagradables, como el dolor o la tristeza, el estado de ánimo depresivo y la búsqueda de sensaciones fuertes aumentan la predisposición y la vulnerabilidad para que un sujeto desarrolle una adicción.

De acuerdo con Canto González en la mayoría de los casos, las personas que padecen alguna adicción conductual no siguen ningún tratamiento, sin embargo, existen pruebas que confirman que las personas que piden ayuda consiguen mejorar su calidad de vida.

“Este tipo de adicciones se abordan desde una perspectiva multidisciplinar, siendo la terapia psicológica un punto imprescindible y fundamental en la intervención. Todo tratamiento es personalizado y busca restablecer y mejorar las áreas importantes de su vida: salud física y mental, relaciones familiares, sociales y el trabajo”, manifestó.

Por su parte, el diputado local, Manuel Díaz Suárez, señaló que si bien en Yucatán ya existe una Ley contra las Adicciones, está destinada únicamente para prevenir y atender temas como alcoholismo, tabaco o drogadicción, dejando de lado las adicciones conductuales que se han incrementado en los últimos años.

Por ello, destacó que es urgente destinar mayores recursos para el tratamiento de las adicciones conductuales, como los establece la Ley de Salud, que fue aprobada en la pasada legislatura y en la que se contemplan la instalación del Consejo Estatal de Salud Mental, la Integración del Instituto de Salud Mental y acciones para prevenir el suicidio.

DATO

Las adiciones conductuales son reconocidas por el Manual Diagnostico y Estadístico de Trastornos Mentales (DSM-5) y por el CIE11, que es la última actualización del catálogo de enfermedades mentales, particularmente estamos hablando del reconocimiento de la adicción a los juegos de azar, videojuegos y al internet.

Jorge Euán