Reconoce Iglesia generosidad de cristianos

Arzobispo de Yucatán destaca el papel de la mujer en esta pandemia

Mérida, Yucatán, a 19 de abril de 2020.- Al celebrar este día del segundo domingo del tiempo litúrgico de Pascua, el Arzobispo de Yucatán Gustavo Rodríguez Vega exhortó a las familias yucatecas a vivir como verdaderas iglesias domésticas, “escuchando las enseñanzas de los pastores, esforzándose por vivir la comunión fraterna, siguiendo la misa en redes sociales haciendo comuniones espirituales y perseverando en la oración”.

Asimismo, destacó el papel de las mujeres a lo largo de la historia de la Iglesia, y ahora durante la pandemia del coronavirus Covid-19, donde son factores de unidad y fe dentro de las familias.

“No cabe duda de que Dios nos está bendiciendo con el carisma femenino, en un tiempo que el Espíritu nos mueve a dar más y más, su lugar a la mujer, en la Iglesia y en la sociedad”, precisó.

A puerta cerrada en la Catedral de Mérida, el Prelado señaló que a lo largo de estos veinte siglos, la comunidad cristiana ha expresado su fe, compartiendo con los necesitados, y ahora no es la excepción, ya que desde que comenzó la cuarentena muchos cristianos generosos sostienen con su ayuda los gastos de sus parroquias.

“En Yucatán, muchos católicos en sus parroquias y comunidades se han organizado, además de lo que ha hecho el Gobierno del Estado, para que nuestra Iglesia esté cercana a los pobres durante esta contingencia sanitaria, por medio de despensas. Esto es misericordia”, manifestó Mons. Rodríguez Vega.

Asimismo, el Arzobispo exhortó a los fieles a valorar y a unirse de forma espiritual al sacramento de la eucaristía, ya que en esta pandemia se vive un ayuno sacramental.

“Ahora que he visitado a tantas comunidades donde el sacerdote no puede ir los domingos a celebrarles la Eucaristía, los he exhortado para que no dejen de congregarse en el Día del Señor, a que escuchen su Palabra, oren como Iglesia que son”, señaló.

Añadió que el ayuno de frecuentar los sacramentos “nos santificará, pero pronto, con la gracia de Dios, esto terminará. Hoy toca, ofrecer este ayuno de la Eucaristía, a mucha gente buena. La espera es santificadora, sobre todo si aceptan la indulgencia plenaria que el Papa ha ofrecido para cada día de la pandemia”.

Jorge Euán