Tiro al Blanco:

Las mayores acusaciones en contra del gobierno federal son para el IMSS cuyas clínicas parecen estar siendo desmanteladas, pues carecen de suficientes equipos para atender oportunamente a la gente.

En el IMSS de acuerdo a los derechohabientes ya ni se subrogan servicios y los usuarios para poder obtener placas u otros estudios especializados deben esperar entre 15 y 45 días.

Cuestión aparte es la falta de camas, de medicamentos y de personal, a grado tal que los fines de semana son en cualquier clinica del IMSS en Mérida, una auténtica locura. Lo pasamos al costo.

Lo peor de todo es que para el delegado de la institución, Jorge Méndez Vales, la institución está funcionando en forma «normal y eficiente».

No pocos derechohabientes ya prefieren consultar en «Simi» antes que esperar largas horas y acompañado de los pésimos tratos, que ahora brinda personal del IMSS, sobre todo los que atienden directamente a la gente. (desdeelbalcon.com)